Los Bomberos de Zaragoza tuvieron que sofocar en la madrugada de ayer el incendio de un almacén de repuestos de automóvil en Cuarte de Huerva. Una extinción complicada en primera instancia porque la fábrica estaba cerrada, pero sobre todo porque las llamas amenazaron con extenderse a una nave contigua con material altamente inflamable. Finalmente, con apoyo de los Bomberos de la Diputación, consiguieron que el fuego se restringiera al altillo del almacén.

Los equipos recibieron el aviso del incendio en la nave de Repuestos Ibáñez, en el polígono Los Huertos, en torno a las dos y media de la madrugada, y se trasladaron al lugar. Allí, tuvieron que forzar la puerta para entrar al recinto, y comprobaron que el fuego estaba confinado en la parte alta de la nave, donde se almacenaban principalmente los repuestos de todo tipo para vehículos. La superficie, que fue la que finalmente ardió, era de unos 350 metros cuadrados, según fuentes del Cuerpo de extinción.

Ante la dificultad de la tarea y la posibilidad de que el fuego se extendiese a la nave contigua, que almacenaba colchonetas de gomaespuma, los bomberos trasladaron a la zona cuatro autotanques, además de un brazo articulado, un vehículo de mando y una ambulancia. Afortunadamente al estar la fábrica cerrada y ubicada en un polígono alejado de la población, no fue necesario atender a nadie por intoxicación ni quemaduras.

Los Bomberos de Zaragoza abandonaron la zona, una vez dieron el fuego por controlado, en torno a las cinco de la madrugada. Ya habían acudido sus compañeros de la DPZ, concretamente de los parques de La Almunia y Calatayud. Estos se encargaron de rematar la extinción del incendio de la nave de repuestos.