El Departamento de Educación, a través de su directora provincial de Zaragoza, Montserrat Martínez, se comprometió, el pasado martes, a "intentar corregir" los problemas causados en el inicio del curso de los dos últimos años como consecuencia de la tardía contratación del profesorado interino, que se incorporó a sus centros dos días antes del comienzo de las clases.

La declaración de intenciones quedó patente en un encuentro llevado a cabo entre la representante del departamento y los más de 160 directores de centros de Infantil y Primaria de toda la provincia. "Le expusimos que no es de recibo que los interinos se incorporen tan tarde porque no pueden participar en la distribución de grupos ni formar parte de un proceso tan esencial como el comienzo de curso", expuso uno de los directores presentes en la reunión.

Porque Educación volvió a fijar la contratación de estos docentes en la segunda semana de septiembre, cuando los centros comenzaban a trabajar desde el día 2. "Fue un caos porque se acumula el trabajo y en algunos centros hasta el 50% de su personal son interinos", advirtió otro director.

En el encuentro, habitual cada comienzo de curso, también se abordó la desaparición de la prueba de Evaluación Censal de Diagnóstico, que hasta ahora se llevaba a cabo a los alumnos de 4° de Primaria, y que pasará a ser sustituido por otras dos en 3° y 6° --esta última externa--. En ambos casos, se hará a través de un muestreo, es decir, no la realizarán todos los alumnos del centro.

Asimismo, los directores mostraron sus quejas por la pérdida de protagonismo de los Consejos Escolares de los centros, relegados por la reforma educativa del Gobierno a un papel "demasiado secundario" según los directores. Así, estos organismos pasarán de ser "decisorios" a "meramente consultivos".

Además, la jornada continua y la posibilidad de su implantación en los colegios también fue motivo de debate. En este sentido, Martínez incidió en que la Administración educativa está pendiente de los resultados que obtenga la prueba piloto implantada en Monzón para abordar una posible extensión de la libre elección de jornada. En cualquier caso, la directora provincial insistió en que "no se obligará a nadie".