La desaparición de Víctor da Silva en Nochevieja tiene un mal precedente en la de otro joven de edad similar (21 años, por los 19 del brasileño), también estudiante de la Universidad de Zaragoza, aunque de Ingeniería Técnica, del que no se ha vuelto a saber nada, que haya trascendido, desde el fin de año de 1992. Acudió a celebrarlo al pabellón de Saviñán, y habló con su familia en Zaragoza para felicitarles el año. Luego, alguien le vio a las tres de la mañana en la puerta del pabellón. Y desde entonces, nada. El caso movilizó a los vecinos de la localidad, a la familia y a la Guardia Civil, pero no lograron encontrarle en las inmediaciones. No se ha vuelto a saber nada de Juan Jesús Duro desde entonces.