Por primera vez un miembro del Gobierno de Aragón admitió errores en la gestión del Ingreso Aragonés de Inserción (IAI). No fue su máximo responsable, el consejero de Sanidad, Ricardo Oliván, sino el portavoz del Ejecutivo, Roberto Bermúdez de Castro. Ante la protesta de las familias, el número dos de Luisa Fernanda Rudi, reconoció que si hay ciudadanos que tienen derecho a percibir el IAI y no lo reciben será porque "algo no se ha hecho bien". Recordó que la DGA modificó el decreto que regula el funcionamiento del ingreso con el fin de hacerlo más ágil y eficiente, y sobre todo para garantizar que aquellos que necesitasen la ayuda la tuviesen. "Si las familias que hoy --por ayer-- se han manifestado tienen derecho al ingreso aragonés y siguen sin él es porque será necesario mejorar la gestión y ser más eficientes". Cuando se ha preguntado por este asunto a Oliván, incluso en las Cortes, ha negado fallos e incluso ha asegurado que no existen retrasos en la concesión de estas ayudas.