Más de 300 personas secundaron ayer en Huesca la manifestación contra los "recortes" sanitarios y la "privatización" de un sistema que, según denunciaron representantes de varios colectivos aragoneses presentes en la marcha, "los jefes de la Sanidad de España están traspasando a manos externas y privadas".

La protesta, que culmina varios días de reivindicaciones en Aragón tras el inicio a pie de la Marcha por la Sanidad el pasado sábado en Alcañiz, contó con la presencia de numerosas personas que se desplazaron desde Zaragoza, de donde partieron tres autobuses a primera hora de la tarde. Durante el recorrido, que partió desde el Palacio de Congresos, se entonaron cánticos contra la gestión sanitaria del Departamento de Sanidad del Gobierno de Aragón y pidieron la dimisión del consejero Ricardo Oliván.