La Policía considera que los responsables del crimen de Reyes llegaron de fuera de Zaragoza para asesinar a Ariel Carrasco, y volvieron a marcharse tras matarle con cuatro disparos en su casa de la calle Navas de Tolosa, en Delicias. Ayer, tres días después del brutal asesinato, alrededor de un centenar de familiares y amigos despidieron al joven dominicano de 24 años en el cementerio de Torrero.
Los investigadores siguen manejando como hipótesis principal que el asesinato fue fruto de un ajuste de cuentas por drogas, por las características del crimen. Es algo que algunos amigos del finado, como Víctor y Abraham, compañeros de equipo en el Distrito Universidad de baloncesto, rechazaban ayer a las puertas de la capilla. "Era un buen muchacho, y deportista, jamás le vimos metido en ningún tema de drogas", aseguraba Víctor.
Las circunstancias exactas del asesinato aún no han trascendido, al estar el caso bajo secreto de sumario. Sí se sabe que el o los autores acudieron a la vivienda, en el piso segundo C, y mantuvieron una discusión con la víctima que hizo asomarse al rellano a una vecina. Esta resultó herida leve por una bala perdida cuando se acercó a la puerta, alarmada por los gritos.
A la víctima le impactaron cuatro disparos en la zona frontal, que le costaron la vida pocas horas después del ataque, ocurrido sobre las 18.30 horas del lunes. La vecina fue atendida la misma noche en el hospital Clínico y dada de alta ante la poca entidad de las lesiones.
Los responsables del crimen podrían integrar una banda de narcotraficantes colombianos, que habrían acudido a interceptar la droga que la víctima habría traído de Barcelona. Un extremo que no pudo ser confirmado oficialmente por el citado secreto de sumario. No ha trascendido que se encontraran drogas en la vivienda.
Tampoco que haya habido detenidos hasta el momento, aunque al entorno de la familia le habían llegado algunos rumores, falsos según la Policía. Los amigos de Ariel que podían hablar ayer en el funeral no se explicaban quién pudo asesinarle y por qué. "No tenía enemigos, no sé cómo ha podido pasar esto", aseguraba un componente de su familia política que prefirió no identificarse.
Los investigadores del grupo de Homicidios de la Jefatura Superior de Policía de Aragón continúan analizando las grabaciones de las cámaras de seguridad próximas a la vivienda y tirando de todos los cabos para encontrar a los culpables.
