La Unidad Militar de Emergencias (UME) ha desplegado más de 150 soldados para realizar actuaciones en una mota del Ebro que protege el municipio zaragozano de Boquiñeni, que tiene filtraciones y para actuar en caso de necesidad ante el riesgo de inundaciones en la zona.
Al principio se pensaba trabajar en el recrecimiento de la mota, pero finalmente se ha decidido no hacerlo porque el peso de la tierra podría provocar daños en la mota, han informado hoy fuentes del Gobierno de Aragón.
Los efectivos de la UME están controlando además el resto de municipios para actuar en caso de necesidad.
Según han informado hoy a EFE fuentes de la UME, los más de 150 soldados que se han desplazado a Boquiñeni provienen del IV Batallón de la UME, ubicado en la Base Aérea de Zaragoza, provenientes de tres núcleos, uno de contención, otro de achique y un tercero de evacuación y rescate.
Además, para actuar en el eje del Ebro, se han activado dos helicópteros, uno de rescate y otro de reconocimiento, de la base aérea de Colmenar.
El IV batallón de la UME en Zaragoza está compuesto por 460 personas, de los que son susceptibles de intervenir en las próximas horas en caso de necesidad alrededor de 350, según dichas fuentes.
En caso de necesidad, la UME movilizaría soldados de los batallones de Madrid, León y Valencia.
Todos los operativos de emergencia están preparados para hacer frente a la crecida del Ebro, según el Gobierno de Aragón.
En cuanto a los 83 residentes de un centro de la tercera edad de Mozalbarba, un barrio rural de Zaragoza, han sido trasladaos a residencias públicas de la provincia, concretamente a Las Fuentes, Delicias, Romareda, Casa Amparo, Hospital San Juan de Dios, Centro Asistencial de Calatayud.
Asimismo se han trasladado algunos ancianos a las residencias privadas SAR Zalfonada, SAR Fontibre y Royal Augusta.
El consejero de Sanidad, Bienestar Social y Familia, Ricardo Oliván, acompañado por la Directora del IASS, Cristina Gavín, han visitado la residencia para coordinar los trabajos de traslado.
Por otro lado, operarios de la empresa SARGA están trabajando en el municipio de Gallur donde están construyendo un cordón de tierra para reforzar la mota y evitar filtraciones al barrio bajo del pueblo.
El Centro de Coordinación Operativa (CECOP) se reunirá de nuevo mañana a las diez y media de la mañana para analizar los últimos datos que aporte la Confederación Hidrográfica del Ebro y continuar coordinando los operativos de emergencia de Protección Civil.
Las previsiones apuntan a que la cresta de la crecida llegará a Novillas a mediodía del viernes con un caudal próximo a los 2.400 metros cúbicos por segundo y una altura de unos 7 metros, y a Zaragoza capital lo hará en la noche del sábado con unos 2.100 metros cúbicos y 5,30 metros de altura.
El Gobierno de Aragón no descarta que en las próximas horas sea necesario realizar nuevos desalojos preventivos.
