Un zaragozano se sentó ayer en el banquillo del Juzgado de lo Penal número 4 de la capital aragonesa por, presuntamente, consumir películas porno de menores. Roberto I., que se enfrenta a seis meses de prisión por un delito que solo está penado con un máximo de un año de cárcel, admitió que se los descargó, pero que al comprobar que el contenido era de niños lo borró.

Sin embargo, la Fiscalía le resaltó que la Policía halló en su ordenador una carpeta denominada 5 porno en la que había "casualmente" cinco películas de contenido erótico. Algo que el procesado justificó, señalando que "no había comprobado qué había en su interior, si no las hubiera eliminado".

Afirmó que se descarga miles de archivos al día entre películas, música y series y que "a veces detrás de un título normal hay quien enmascara películas porno". "Veía películas porno de adultos, de travestis, pero no de niños", reiteró en varias ocasiones durante su declaración ante la jueza.

ACCIDENTE

Este hombre fue detenido en el marco de una operación en varias provincias de la Policía Nacional contra la pornografía infantil. En su casa encontraron esas cinco películas, pero también consiguieron recuperar 68 títulos pedófilos que habían sido eliminados.

Para los miembros del Grupo de Delitos Informáticos de Zaragoza está claro el uso de los mismos, ya que "los vídeos descargados en una carpeta general los metió en otra que creó de forma expresa". "Accidentalmente uno no puede seleccionar esos vídeos y almacenarlos en el mismo sitio", remarcó.

A pesar de todo, el abogado defensor solicitó la absolución, ya que cuestionó que la Policía no haya podido confirmar que hiciera uso de los mismos.