Cinco personas han fallecido y seis han resultado heridas, tres de ellas muy graves, en la explosión que se ha registrado hoy en la empresa Pirotecnia Zaragozana, que ha causado una gran alarma en kilómetros a la redonda por el fuerte estruendo y la columna de humo negro que ha provocado.

Tres de los heridos se encuentran hospitalizados en estado muy grave, otros dos tienen pronóstico reservado y un sexto está en observación en el servicio de Urgencias.

Los heridos son tres mujeres y tres hombres de edades comprendidas entre los 25 y los 57 años, según el parte médico hecho público por el Gobierno de Aragón.

Con pronóstico muy grave se encuentran el joven de 25 años R.E., ingresado en la UCI del hospital Miguel Servet de Zaragoza, donde también se encuentra la mujer identificada con las iniciales S.L.C. La otra persona más grave, una mujer de 45 años, identificada con las iniciales A.L.C., está ingresada estable con pronóstico reservado en la UCI del hospital Clínico, también de la capital aragonesa.

Los otros tres heridos están en el Miguel Servet y son A. R. M., una mujer que está en observación en el servicio de Urgencias, y los hombres P.M.M.C. y J.M.E, de 57 años, ambos ingresados en planta con pronóstico reservado

A pesar de que se había informado que no había más personas desaparecidas, los bomberos desplegados en la zona buscan a un trabajador que se encontraba en la pirotecnia, según fuentes de la Delegación del Gobierno en Aragón.

La Policía Nacional y la Guardia Civil ha establecido un gran perímetro de seguridad ya que se sigue produciendo alguna explosión, lo que dificulta el trabajo de la unidad canina, de los técnicos del Tedax y de los bomberos, que actúan con mucha cautela ante la gran cantidad de material que ha quedado esparcido por las instalaciones.

El Delegado del Gobierno, Gustavo Alcalde, ha señalado que las Fuerzas de Seguridad abrirán la correspondiente investigación para conocer las causas de la explosión, aunque ha advertido que llevará su tiempo.

La zona en la que se encuentra la empresa es el barrio de Garrapinillos, una zona residencial próxima al aeropuerto de la capital aragonesa, cuyo alcalde, Luis Miguel Roda, ha informado que no se han producido daños en las viviendas. No obstante, el alcalde ha explicado que en este núcleo de población, ubicado a 9 kilómetros de la capital aragonesa, los vecinos se han sobresaltado por el fuerte ruido de la explosión.

La empresa lleva "bastante años" en Garrapinillos, se encuentra alejada de las viviendas por motivos de seguridad, ha añadido, por lo que la explosión no ha afectado a inmuebles aunque los vecinos han afrontado la situación muy asustados.