La época de peligro de incendios forestales comenzó el pasado miércoles en Aragón y, en consecuencia, entra en vigor la prohibición con carácter general de hacer uso del fuego al aire libre, salvo en escasas excepciones. Entre ellas, se encuentran la eliminación de restos de poda del olivo, que podrá realizarse hasta el día 31 de mayo bajo un régimen de notificación, y el uso del fuego en actos culturales, como romerías, con previa autorización por parte de la administración.

Así, debe hacerse uso del fuego únicamente en aquellas situaciones en las que exista capacidad de control sobre el mismo, evitando las zonas con continuidad de combustible, los días de viento, hacerlo sin medios de extinción o sin capacidad de aviso ante posibles alertas. Además, es imprescindible la vigilancia hasta la extinción completa de todos los restos de quema.

Más del 50 % de los incendios forestales de Aragón se encuentran asociados, en su origen, al uso del fuego en la eliminación de restos o a accidentes y negligencias en el sector agrario.

El Gobierno ya activó hace algunas semanas el operativo de prevención y extinción de incendios forestales.