El Gobierno de Aragón ha pagado hasta junio 284.740 facturas por un importe total de 518.117.027 euros. La Administración autonómica he tenido que echar mano de sus propios recursos --418.370.073 euros-- para cumplir con los proveedores, debido al retraso en la llegada de los fondos procedentes Estado, de los que se han recibido 100,1 millones. Pese a ello, a lo largo de ejercicio se ha mantenido como una de las comunidades que más tarde salda sus deudas. El último dato, el de mayo, deja una demora de 93,52 días, muy lejos de la que permite la ley.
El retraso en la llegada del Fondo de Liquidez Autonómica (FLA), prevista para principios de año, pero que el Ministerio de Hacienda no transfirió hasta el 18 de mayo, ha obligado a la DGA a salir del paso con dinero de Tesorería. Por esta vía se han pagado 418.370.073 euros correspondientes a unas 220.000 facturas. De ellas, la cuantía más relevante, 166 millones, corresponde a pagos a los organismos autónomos como el Instituto Aragonés de Servicios Sociales (IASS) o el Salud, que son, especialmente este último, los que acumulan el mayor volumen.
MECANISMOS ESTATALES
Mucho más, por ejemplo, que las facturas procedentes de los proveedores vinculados a las inversiones reales, que a lo largo del ejercicio han supuesto un desembolso para la Tesorería, de 30,3 millones. También es remarcable el pago realizado al colegio de farmacéuticos por las recetas del sistema sanitario, y que ha ascendido hasta junio a 143,3 millones. El Gobierno tuvo que recurrir a sus propios fondos ante las protestas del sector, debido al retraso que acumulaba. En alquileres, la Administración ha gastado 7,5 millones y en reparación y conservación, 11,2.
Pero además de recurrir a sus propios fondos, la DGA ha recibido también dinero desde el Ministerio de Hacienda. Del Fondo de Facilidad Financiera (FFF) llegaron a Aragón en enero y febrero 29,9 millones. De ellos, 24,4 fueron directamente al Salud para sufragar déficits de ejercicios anteriores. El resto se dedicaron a los desequilibrios de otros años acumulados por la Administración general. El número de facturas pagadas a través de este mecanismo fue de solo 714.
La mayor cuantía ha llegado desde el llamado Fondo de Liquidez Autonómica (FLA), que aunque tarde, ha permitido a la comunidad encaminarse hacia la senda del cumplimiento de sus obligaciones de pago. En el primer trimestre llegaron, el 30 de mayo, 35,4 millones. De ellos, 33 fueron directamente al Salud, para saldar el déficit de otros ejercicios o para hacer frente a liquidaciones negativas. Se pagaron 50.699 facturas, la inmensa mayoría sanitarias.
El segundo trimestre de este año está todavía pendiente de pago. Como ocurrió en los tres primeros meses del ejercicio, los problemas se acumulan en el sistema sanitario. Aunque no ha llegado el dinero, se ha cargado ya al FLA 34,5 millones de euros, y se abonarán 13.327 facturas. El Salud se llevará casi el 100% de la cuantía prevista, salvo algo más de 239.000 euros que corresponden a la Administración general autonómica.
En este 2016, con cargo a los dos mecanismos, FFF y FLA, hasta junio se habrá pagado 100,1 millones de euros que, a efectos prácticos, han supuesto saldar 64.740 facturas en solo dos trimestres. De la cuantía global recibida por Aragón a través de las ayudas de Hacienda, 90,7 millones han ido al Servicio Aragonés de Salud, que es el que acumula el mayor retraso en sus pagos a los proveedores. En todo caso, una vez ingresados los abonos procedentes del Estado, el Ejecutivo autonómico prevé que el periodo medio de pago mejore en junio y que se sitúe ya por debajo de los 60 días.
