El presidente del PAR, Arturo Aliaga, defendió ayer el apoyo de su formación a todas las iniciativas que sirvan de avance hacia la reapertura de la línea internacional del Canfranc ya que este proyecto, así como la Travesía Central por el Pirineo (TCP) son «básicos» para el crecimiento económico y social de la comunidad y también de la capital aragonesa.

Aliaga aseguró que la reapertura no es un problema económico, «ni se le conoce contestación social, ni medioambiental» y, sin embargo el proyecto «siempre se acaba atascando», para opinar que desde hace muchos años la reapertura debería haber sido «una cuestión de Estado». El presidente del PAR deseó que esta «vieja reivindicación» aragonesa acabe siendo «una realidad» y deje de ser una línea «tercermundista en pleno siglo XXI», al tiempo que recordó que durante años los avances conseguidos en las cumbres han quedado en «agua de borrajas».

Respecto a la TCP, defendió su «compatibilidad» con el Canfranc. «No podemos olvidarla», indicó Aliaga, que insistió que ambos proyectos, el Canfranc y la TCP «son irrenunciables para el PAR».