Un rayo caído en el valle de Tena durante una de las numerosas tormentas que descargaron ayer en el Pirineo originó un incendio de pequeñas dimensiones en la sierra de la Partacua, cerca del pueblo dePiedrafita.

La rápida intervención de los medios de extinción evitó que el fuego se extendiera en la zona arbolada donde se había producido el foco.

El incendio se inició en la vertiente sur de la citada sierra, dentro del término municipal de Biescas e inmediatamente se trasladaron al lugar dos cuadrillas helitransportadas.

El fuego se inició sobre las tres de la tarde, según fuentes de la Diputación General de Aragón (DGA).

Por otro lado, la Administación autónomica calculó que en torno a 25 hectáreas de pino y matorral de coscoja y enebro fueron destruidas en el incendio que se declaró en la zona de Maella.

La Administración autonómica destacó numerosos medios para evitar la propagación de las llamas y a lo largo del día de ayer se mantuvo un dispositivo de vigilancia para evitar que pudieran reavivarse.

Gran parte de Aragón se halla desde hace varios días en situación de alerta máxima por la posibilidad de que se produzcan incendios forestales.

Las altas temperaturas que afectan al territorio, entre 35 y 40 grados de máxima en numerosos puntos, unido a la sequía extrema originada por la falta de lluvias han creado una situación de alto riesgo.

Se ven afectados todos los sistemas montañosos de la comunidad, desde la Ibérica zaragozana y turolense hasta el Pirineo, pasando por el Prepirineo. De ahí que el dispositivo antiincendios se halle en situación de máxima alerta con el fin de intervenir antes de que las llamas alcancen grandes proporciones y se extiendan rápidamente.