El candidato a la alcaldía de Zaragoza por el PP ha llamado este viernes, último día de campaña, a cerrar una etapa de "confrontación y de lío" en el consistorio y dar paso a un "cambio en positivo y tranquilo" liderado por su formación.

En una rueda de prensa de balance de campaña conjunta con el aspirante a la presidencia aragonesa, Luis María Beamonte, Azcón ha pedido apoyo para llevar a cabo un proyecto que acabe "con ser la primera ciudad de España que lleva 16 años seguidos de gobiernos de izquierdas" algo que ha hecho, a su juicio, que se convierta en "la ciudad más endeudada de España".

Para el edil zaragozano se trata de una izquierda "dividida y confrontada" que se refleja como en un espejo en Zaragoza en Común (ZeC), donde "ni los suyos han respaldado unilateralmente al alcalde".

En cuanto a estos cuatro años de mandato de ZeC, el líder municipal del PP ha descrito su oposición como "útil y constructiva", pero también "contundente" frente al "peor Gobierno de la historia".

"Cuando alguien ha tenido que ir a los tribunales a denunciar que una terrorista de los Grapo venía a dar una conferencia, cuando alguien ha tenido que denunciar que se intentaba cambiar el nombre al Pabellón del Príncipe Felipe saltándose la legalidad y cuando alguien ha tenido que dar cara ante el hazmerreír que estaba siendo el Ayuntamiento de Zaragoza ha sido el PP", ha expresado.

Azcón también ha tenido palabras para la candidata de Ciudadanos, Sara Fernández, a quien ha pedido que en este último día de campaña aclare con quién estarían dispuestos a pactar.

"El proyecto de Ciudadanos se parece mucho al nuestro y ha llegado la hora de que los zaragozanos saquen conclusiones. O contesta o tendrán que sacar sus propias conclusiones", ha señalado.

En cuanto al Partido Aragonés, ha predicho que "por desgracia" parece que no conseguirán un concejal, por lo que ha reiterado su oferta de que la candidata por la lista aragonesista, Elena Allué, se incorpore a su equipo si no logra representación.