El carnet de familia monoparental da sus primeros pasos en Aragón y lo hace con buenas sensaciones a su alrededor aunque con algunos puntos en el aire. Son aquellos relativos a los servicios y ventajas que integrará para este colectivo que suma 57.122 personas viviendo en un núcleo con un solo progenitor y con hijos menores de 25 años a su cargo. No obstante, desde la apertura del plazo de solicitud el pasado día 14 ya van 144 peticiones -103 de Zaragoza, 15 de Teruel y 17 de Huesca- y más de tres centenares de consultas relativas a este documento.

Como muestra de esta mezcla de sensaciones, basta con atender al punto de vista de la Asociación de Madres Solteras y Solas (Amasol). Desde el colectivo consideran que el carnet «es un desahogo y una dignificación», así como una «visibilización» de un colectivo que, hasta ahora, no estaba reconocido como tal.

También muestran su satisfacción con el hecho de que el carnet ya les reconoce la figura y no resulta necesario acreditar su situación con todos los documentos que hasta ahora les exigían. Una realidad que les hacía llevar «el maletín» y que, a juicio de Amasol, podía suponer la vulneración de su derecho a la intimidad.

No obstante, desde el colectivo apostillan que se trata de «un primer paso» y se muestran a la expectativa de las medidas concretas que incluirá. Por ello, consideran que «habrá que seguir reivindicando» para que el paquete de prestaciones se amolde a las necesidades del de estas familias.

Sobre este tema se refirió el pasado jueves la consejera de Derechos Sociales del Ejecutivo autonómico, Mariví Broto, durante el acto de entrega de los primeros carnets. En esa cita, la consejeraadelantó que el Gobierno de Aragón, «desde el ámbito del empleo, está estudiando la posibilidad de introducir medidas en sus programas que favorezcan específicamente la empleabilidad y la inserción de los miembros de familias monoparentales».

En una línea similar se mostró la directora general de Igualdad y Familias, quien expresó días antes que están trabajando con el departamento de Educación y con el Instituto Aragonés de Empleo, además de comenzar a plantear este asunto con Transportes.También con otros organismos autonómicos, como el Instituto Aragonés de la Juventud(AIJ), y desde la propia consejería que dirige Broto, en relación a «algún beneficio en el Instituto Aragonés de Servicios Sociales y el en de la Mujer (IAM). «Estamos avanzando y teniendo conversaciones. En vivienda también, que es importante», remachó. Al respecto, precisó que el Ejecutivo publicará en internet «los beneficios» que incluirá, «tanto en entidades públicas como privadas».

Sobre la llegada del carnet, Sevillano recordó que era una de las «mayores reivindicaciones» de estas familias y se mostró satisfecha por haber cumplido este objetivo del Gobierno aragonés. «Nos pedían un reconocimiento que les facilitara cualquier tipo de gestión, no tener que llevar todo el papeleo. Muchas veces exponían aspectos de su vida que no les apetecía. Y con este carnet se les reconoce beneficios», recalca.

El 75% de los progenitores de estas familias son mujeres y el 69.1% viven en núcleos urbanos. De hecho, el 58% reside en la ciudad de Zaragoza.