El ritmo de creación de empleo en Aragón se ha reducido como consecuencia de la desaceleración que afecta a España y al conjunto de Europa. Sin embargo, la consejera de Economía, Marta Gastón, alertó ayer de que hay subsectores como la hostelería, el transporte terrestre, la agricultura y el colectivo de empleadas del hogar que están sufriendo de forma más acusada este menor ritmo de creación de empleo. Y una de las posibles causas podría ser el incremento del Salario Mínimo Interprofesional (SMI) a 900 euros, un hecho del que ya alertaron algunas instituciones cuando esta subida entró en vigor, en enero del 2019. Es decir, el aumento de los salarios más bajos ha podido retraer o reducir la contratación en Aragón en algunos subsectores de la economía.

El contenido del informe fue analizado ayer por la consejera de Economía y los representantes de la patronal (Cepyme y CEOE Aragón) y de los sindicatos (UGT y CCOO) durante el encuentro que mantuvieron para poner en marcha la Agenda Aragonesa por el Empleo, en el marco del diálogo social. El estudio detalla cómo ha evolucionado la afiliación a la Seguridad Social y el paro durante los últimos cinco años en un total de 80 subsectores, entre los que destaca la agroalimentación, que ha sido el que más puestos de trabajo generó en dicho periodo, en concreto 1.862 en el último año. También experimentó una evolución positiva las actividades ligadas con la construcción, las actividades sanitarias y la programación y consultoría.

En términos generales, la disminución del paro registrado se ha frenado en los últimos cinco años, ya que se ha pasado de una reducción del 12,6% entre el 2015 y el 2016 a solo el 3,6% en el último año. De esta forma, la tasa de paro apenas ha descendido el 0,4% en el último ejercicio frente al 3,5% del 2017. El informe también señala que la afiliación a la Seguridad Social creció el 3,3% en los nueve primeros meses del 2018 y solo el 1,8% en el mismo periodo del 2019.

«Más allá de la desaceleración económica, no casa que la comunidad tenga una mejor situación que España en cuanto a crecimiento económico y eso no tenga su reflejo en el mercado laboral», subrayó la consejera. Por ello, una de las tareas en las que se implicarán la DGA y los agentes sociales a partir de ahora será analizar las causas. «Tenemos que sacar conclusiones de por qué ese ritmo ha caído bruscamente en materia de afiliación a la Seguridad Social», subrayó Gastón.

DEFENSA DEL SALARIO MÍNIMO

Otra de las causas de este menor aumento del empleo es el incremento de la población activa en el último año, que ha crecido el 1% en el 2019. Pero la DGA sospecha que hay otros factores como el aumento del salario mínimo, un hecho que podría explicar que en los servicios el repunte de la afiliación caiga a la mitad respecto a hace un año y en la agricultura lo haga en un tercio.

El presidente de Cepyme, Aurelio López de Hita, apostó por no entrar en intuiciones sino en certezas. No obstante, reconoció que la subida del SMI puede tener un efecto en la contratación. El BBVA ya dijo en su día que el aumento del salario mínimo «dejará ganadores y perdedores» y entre estos últimos situó a aquellos que pierden su empleo. Puede ser el caso de las empleadas del hogar (-881 empleos en un año en Aragón), pero también de los empleos a través de ETT, que registran 707 afiliados menos, según el informe de la DGA.

LOS SECTORES

El informe elaborado por el departamento de Economía señala que la afiliación ha crecido de forma notable en el último año, además de en agroalimentación, en actividades como asistencia en establecimientos residenciales (565 afiliados más), construcción de edificios (578), actividades administrativas de oficina y otras auxiliares a las empresas (589), educación (641), programación, consultoría y relacionadas con la informática (650), actividades sanitarias (724), administración Pública y defensa; Seguridad Social obligatoria (897), Actividades de construcción especializada (992).

En el tercer trimestre del 2019, Aragón contaba con 582.155 afiliados a la Seguridad Social frente a los 520.732 del mismo periodo del 2015. Mientras, la población activa ha crecido en los últimos cuatro años casi en 4.000 personas y 12.000 solo en el último año.