LA Federación Aragonesa de Gremios y Asociaciones de Librerías (FAGAL) reclamó ayer al Gobierno de Aragón el pago inmediato de las becas de los libros de texto que todavía está pendiente tras seis meses de haberse iniciado el curso escolar.

La agrupación lamenta que, un año más, se repita la misma situación desde el 2011, ya que perjudica «seriamente el estado financiero de muchas librerías», cuya situación se ve aún más agravada por la declaración de estado de alarma del país, que ha supuesto el cierre temporal de muchos de estos establecimientos.

La federación recordó que las librerías adquieren los libros a través de editoriales y distribuidores, a los que abonaron las facturas antes de final del 2019, y que la mayoría se ven obligadas a solicitar un crédito bancario para atender los pagos a la espera de recibir la cuantía económica desde el Gobierno de Aragón. La entidad, compuesta por las asociaciones provinciales de Zaragoza, Huesca y Teruel, destaca que a lo largo del 2020, el Ejecutivo ha hecho varios libramientos que han abonado parte de las facturas emitidas por librerías, pero todavía quedan más de 40 empresas pendientes de recibir dicho pago.

El presidente de la entidad librera, Óscar Martín, recordó que esta deuda que reclaman corresponde a materiales que fueron entregados a los alumnos en septiembre del pasado año y que las librerías ya facilitaron toda la documentación a la DGA a mediados de octubre.