Las pruebas realizadas ayer en Binéfar arrojaron casi 180 casos positivos de coronavirus, tras realizar 742 test, que dieron un resultado positivo en el 24%. Las inmediaciones exteriores de la empresa cárnica Litera Meat (también conocida como Pini) se convirtieron en el escenario de recogida de las muestras, donde cientos de trabajadores formaron largas colas para hacerse los test de covid-19 tras el brote detectado entre la plantilla.

Los empleados se acumularon sin guardar las medidas de seguridad requeridas a primera hora de la mañana. El departamento de Sanidad convocó a los trabajadores, dado que en la localidad se dio un brote, con 85 casos positivos confirmados de covid-19, y el epicentro de la pandemia se halla en dos industrias cárnicas que suman 1.600 trabajadores. Según fuentes del Gobierno de Aragón, el acopio de personas se dio a su llegada, al comienzo de la jornada. «Después, la guardia civil mantuvo el orden y las distancias», explicaron. «La colaboración y organización dentro fue escrupulosa; fuera estaba organizado con un escalonamiento de la llegada de personal y hubo un cúmulo durante hora y media o dos horas», detalló el alcalde de la capital de La Litera, Alfonso Adán.

Se citó por parte de la empresa a 80 empleados a cada hora. El 55% de los trabajadores a los que se les hizo la prueba vive en territorio aragonés y el resto en Cataluña. «Tanto las autoridades sanitarias como las fuerzas de seguridad siguieron el protocolo, y la colaboración entre la empresa y las administraciones fue total», añadieron. «El dispositivo que se montó se organizó por Sanidad junto a la empresa. Las personas de servicios sociales de la comarca me trasladaron que fue el mayor dispositivo realizado en Huesca, porque creo que ronda en torno a los 800 test», apuntó Adán.

Las imágenes que dejó el llamamiento abocaron a pensar que no se siguió ningún protocolo de seguridad, lo que denunció UGT Aragón. «Deben establecerse protocolos de distancia de seguridad, al igual que cuando se accede por ejemplo a establecimientos alimentarios», explicó José de las Morenas, secretario de Política Sindical e Industrial y Salud Laboral y Medio Ambiente de UGT. El sindicato exigió que la empresa tome las medidas necesarias, guardando los dos metros de distancia, ya que «la capacidad de organización la tiene la empresa». Indicó también que «las administraciones públicas deben evitar estas situaciones y vigilar que se cumplan las medidas, asegurando que se extremen». De las Morenas incidió además en que todas las empresas deberían tener a disposición test rápidos para determinar la exposición laboral de sus empleados.

Desde Cemsatse se considera que «se puso en riesgo la salud de muchas personas al concentrar y transportar sin las mínimas condiciones de separación y protección a numerosos empleados, mezclando supuestamente a trabajadores sanos con enfermos». «Se ha puesto en serio peligro a los trabajadores sanitarios y fuerzas del orden encargadas de realizar las pruebas y organizar el desarrollo de las mismas. Y finalmente se ha puesto en riesgo a la población de la comarca de la Litera y localidades cercanas, al facilitar la extensión descontrolada del brote de coronavirus», según Ramón Boria, delegado sindical de Cemsatse.

El alcalde de Binéfar informó de que se realizarán test a los empleados de la industria Fribin y el lunes se hicieron en la plantilla de la Policía Local.