El joven de Alcañiz detenido el domingo como presunto autor de la muerte de su pareja sentimental pasa hoy a disposición judicial. El hombre de 29 años habría asesinado a su novio, otro varón de 39 años y vecino de Valencia, en una finca familiar ubicada en la zona de la carretera de Castelserás.

El detenido se encuentra en las dependencias de la Benemérita en Alcañiz, ante la que se ha negado a declarar y donde puede permanecer un máximo de 72 horas. El suceso se encuentra bajo secreto de sumario. Se prevé que preste declaración ante la jueza del Juzgado de Instrucción número 2 de Alcañiz después de intencionado silencio ante la Guardia Civil, que ha hallado pruebas en el escenario. Estas se aportarán junto a los informes forenses de la autopsia, practicada en el Instituto de Medicina Legal (IMLA). La víctima podría haber muerto estrangulada, ya que había signos de ello producidos, según ha podido saber este diario, por un collar del fallecido que fue encontrado en el césped a pocos metros de la piscina donde se encontró el cadáver.

Al arrestado, de 29 años y que responde a las iniciales de J. M., se le considera supuesto autor de un homicidio y fue detenido en la noche del domingo cuando se encontraba escondido en el interior de un armario de la casa. Al parecer, según las fuentes consultadas por EL PERIÓDICO, ambos, víctima y agresor iniciaron una discusión muy fuerte y acabaron forcejeando hasta caer en la piscina, en la que, con solo 1,5 metros de profundidad, difícilmente se podía haber ahogado de forma fortuita. Además, la complexión física de ambos era bien diferente, mucho más corpulento el supuesto homicida que el fallecido.

Pero no estaban solos en la finca. Los padres del agresor --adoptivos, ya que él es originario de El Salvador-- eran los testigos a los que anteayer aludían desde la Guardia Civil y los que acabaron dando el aviso de lo que allí se produjo, el crimen que estaba cometiendo su propio hijo con su pareja, con la que había ido a pasar el fin de semana a Alcañiz, desde Valencia, donde ambos residían. En el momento de los hechos estaban en otra parte de la finca y escucharon la fuerte discusión de la pareja. Y, según las fuentes consultadas, el padre del joven alcañizano intentó detenerle utilizando la manguera y se llegó a producir un forcejeo entre ambos. Mientras, la madre se subió al tejado de la casa, asustada.