El Pirineo aragonés siempre es un buen lugar para pasar unos días, pero la factura se puede elevar si uno apuesta por ir a vivir allí. Al menos, eso es lo que ocurre en algunos valles donde el precio de la vivienda se mantiene alto. Formigal, en concreto, es el municipio más caro de Aragón. Allí el coste de un inmueble de 60 metros cuadrados ronda los 180.000 euros, a razón de 2.948 euros por metro cuadrado pese a caer el 1,1% trimestral, según un informe elaborado por idealista en el que se hace un repaso por los municipios más caros de España.

Pero no es la única zona en la que el coste de adquirir una propiedad es elevado. En Benasque, por ejemplo, comprar un piso de 60 metros cuadrados ronda los 150.000 euros (2.432 euros por metro cuadrado), mientras que en Cerler el precio desciende algo, hasta los 2.200 euros por metro cuadrado. Y no parece que la crisis del covid-19 esté afectando en exceso al sector inmobiliario.

«El mercado se está moviendo mucho desde el desconfinamiento», apuntan desde Fincas Aneto, donde se puede oferta una vivienda de dos habitaciones por unos 200.000 euros, aunque también hay inmuebles de 70 metros cuadrados con garaje y trastero por 230.000 euros.

La gente que pregunta y suele comprar son aragoneses, preferentemente de Zaragoza, aunque también hay muchos clientes de Madrid, Cataluña y el País Vasco, señalan desde la oficina de Benasque.

No pasan desapercibidos para los potenciales compradores las obras que se están llevando a cabo en Castanesa para ampliar la estación de esquí de Cerler. «Muchos preguntan si se van a unir las pistas por Castanesa porque el valle puede ir a mejor si eso sucede», apuntan. Eso sí, el precio se mantiene sin apenas variaciones pese a las expectativas de crecimiento y de inversiones en la zona.

El tercer municipio de Huesca donde el coste de la vivienda es también elevado es Escarilla (2.575 euros) por metro cuadrado. En el conjunto de la provincia, el precio medio de la vivienda ronda los 1.330 euros por metro cuadrado, según idealista.com.

RESTO DE ESPAÑA

El municipio más exclusivo de España es la isla de Formentera que tiene el metro cuadrado más caro. Los propietarios de viviendas piden una media de 7.643 euros por metro cuadrado. El podio de los cinco municipios más caros se completa con otras tres localidades baleares y una guipuzcoana: Deya (5.909 euros), Sant Joan de Labritja (5.165 euros), Ibiza (4.910 euros) y la capital guipuzcoana San Sebastián (4.818 euros). El sexto puesto es para Baqueira, en Lérida, con 4.793 euros por metro cuadrado.