Los navegadores de tráfico pueden jugar malas pasadas. Se lo pueden decir a los conductores de dos camiones pertenecientes a la empresa Sesé que se quedaron atrapados en una calle que es la vía de acceso a Montoro de Mezquita, una pedanía de Villarluengo. Los transportistas tuvieron que pasar la noche en la localidad de la comarca del Maestrazgo para iniciar las labores de excarcelación este viernes por la mañana.
Una de las vecinas, María del Carmen Olagué, que está al frente de una casa rural conocida como la del Obrador, todavía no se explica cómo fueron capaces de adentrarse ahí. "La carretera es muy estrecha, lo tuvieron que pasar muy mal, especialmente para atravesar el río Guadalope por el puente porque todavía la anchura es mejor", asegura.
No obstante, Olagué resalta "la pericia y paciencia de los conductores" que cuando ha amanecido han comenzado las maniobras para salir de allí. "Primero lo ha hecho el tráiler que iba detrás del que se encajonó que ha salido marcha atrás por la carretera y luego su compañero que a base de muchos movimientos de volante lo ha podido sacar de ahí", señala, mientras afirma que "hubo un momento que se barajó la posibilidad de tirar un muro para salir".
Las labores han comenzado sobre las 07.00 horas y a las 11.00 horas la carretera volvía a estar limpia. El único acceso alternativo es por una pista solo practicable con todoterrenos, situación que provocó inquietud entre los vecinos y los turistas de la zona por si era necesario el uso de los accesos ante una posible emergencia.
Montoro de Mezquita experimenta estos días de verano una importante afluencia de visitantes, unos 400 diaros, que se dirigen a las pasarelas de Valloré. Desde la oficina de turismo alertaron a otras de la zona que la entrada a esta pedanía estaba cortada.
