Aramón presentará este lunes un expediente de regulación temporal de empleo (erte) que afectará a toda su plantilla. La medida, que fue confirmada por el grupo a este diario, incluye también a los empleados fijos discontinuos, es decir, aquellos que llevan más de dos años trabajando en la empresa pero solo son contratados para las temporadas de invierno.

Se trata, una vez más, de un erte de fuerza mayor debido a las circunstancias de la pandemia que han llenado de incertidumbre el sector y al mercado laboral en la comunidad. Las razones, explicadas por la empresa, engloban el estado de alarma decretado en el mes de marzo, las restricciones actuales de movilidad y la situación epidemiológica, que a día de hoy «todavía mantiene cifras negativas». El grupo empresarial seguirá con «la actividad en la empresa conforme a las necesidades actuales», al tiempo que aseguró que el principal objetivo de la toma de esta decisión es la de «proteger tanto a sus empleados como el futuro de la misma». No obstante, no se descarta la incorporación progresiva de sus trabajadores, ya que «las estaciones del grupo Aramón están preparadas y en perfectas condiciones», pero abrirán «cuando las condiciones meteorológicas y sanitarias lo permitan», señalaron.

Este nuevo reajuste laboral se une al presentado esta misma semana por otra de las estaciones aragonesas de esquí aragonesas, la de Candanchú. En este caso, su director general, Álvaro Luna, manifestó que la medida se debe a causas de fuerza mayor, con una movilidad muy limitada y los confinamientos perimetrales en Aragón, Navarra y el País Vasco, clientes habituales del recinto.

Por otro lado, Luna recalcó que las condiciones climatológicas tampoco han acompañado este año: «El clima no está siendo igual que el del año pasado. Es más, para el 5 de diciembre que era la fecha objetivo no se podía llegar a abrir la estación por falta de nieve», explicó el director general de Candanchú. El erte afectará a unas 20 personas, que son las que forman la plantilla de la estación y que, según informó Luna, se irán incorporando a medida que «los requisitos del día a día» lo hagan necesario. «Cuando tengamos la fecha definida exacta de apertura, se incorporarán los empleados», enfatizó el director de la estación.

«Dadas las circunstancias que se plantearon en el mes de marzo, se hizo una planificación más intensa para el desarrollo de los trabajos básicos para la puesta en marcha de la estación, y esos trabajos se desarrollaron casi en su totalidad antes de llegar a comienzos de este mes. Ya no quedaba trabajo de seguimiento y de puesta en marcha», añadió Luna sobre las razones que han llevado al grupo a tomar la medida.

Por otro lado, desde la estación de Astún, señalaron que todavía no han tomado una decisión porque no saben cómo «va a avanzar la situación».