debate del estado de la ciudad

Zaragoza, pendiente de saber qué pasará con los proyectos olvidados en el discurso de Azcón

El alcalde anunció en su discurso una inversión de 11 millones en calles pero hay lugares que siguen sin recibir la atención necesaria

Zaragoza, pendiente de saber qué pasará con los proyectos olvidados en el discurso de Azcón

Zaragoza, pendiente de saber qué pasará con los proyectos olvidados en el discurso de Azcón

EL PERIÓDICO

El debate del estado de Zaragoza se presenta como un escaparate ideas, de proyectos de ciudad. Una oportunidad para vender propósitos y proyectos que el alcalde, Jorge Azcón, dejó escapar. Su anuncio estrella se centra en la mejora de la escena urbana y marca una clara tendencia continuista de lo que ha sido su primer año bajo la filosofía de que primero hay que arreglar lo esencial para después lanzarse a por proyectos de gran calado.

El primer edil invertirá a través de la sociedad Ecociudad 11 millones para reformar la avenida Navarra (que ya se había anunciado), las calles San Miguel, Reina Fabiola, Cuarte, Ricla, Sixto Celorrio y Félix Latassa. También Predicadores, que pasará a ser peatonal, y la avenida Cataluña, entre Ronda de la Hispanidad y la línea de ferrocarril. Pero nada dijo de lo que tiene previsto hacer en el resto de la ciudad, donde hay edificios abandonados desde hace años a la espera de una segunda oportunidad, planes integrales terminados y pendientes de ejecutar, y convenios con el Gobierno de Aragón o la Diputación Provincial de Zaragoza en el cajón de los olvidos.

Zaragoza, pendiente de saber qué pasará con los proyectos olvidados en el discurso de Azcón

Zaragoza, pendiente de saber qué pasará con los proyectos olvidados en el discurso de Azcón

Azcón dedicó la hora que estuvo al frente del atril, la ventana a la ciudadanía, para hacer un balance de su gestión, tras 17 meses al frente de la Alcaldía, la mayoría en pandemia. Está claro que la crisis sanitaria ha alterado sus planes, pero el primer edil no explicó cuál es su nueva hoja de ruta, ni qué Zaragoza quiere.

LA ROMAREDA

«¿Cuál es su proyecto, una reforma de La Romareda fallida, y la venta de suelo público para que Quirón haga su hospital privado?», se preguntan desde la Federación de Barrios de Zaragoza. Para su presidente, Manuel Arnal, Azcón ha hecho lo que tenía que hacer en una pandemia sanitaria, social y económica, que es «aumentar el presupuesto en Acción Social». Lo mismo opina sobre su «operación calles extraordinaria». «Nos alegra que invierta en los barrios y que trate de mejorar sus calles, pero esto es mantenimiento, es la fontanería de la ciudad, necesitamos algo más», añadió.

El representante vecinal cuestiona que no se haya dicho nada de lo que va a pasar con el Palacio de Fuenclara, o en la antigua cárcel de Torrero que el PP, en la oposición, se comprometió a desalojar si llegaba a gobernar. Nada se sabe al respecto, salvo que los servicios jurídicos están estudiando qué se puede hacer. Tampoco mencionó qué pretende hacer con el centro cívico Luis Buñuel, otro de los compromisos que asumió, junto a la actual concejala de Infraestructuras, Patricia Cavero, estando en la oposición, cuando pregonaron que devolverían el centro a los vecinos del barrio. Nada dijo al respecto en su discurso, tampoco del centro cívico Hispanidad.

Otro de los temas que Azcón protagonizó en la pasada legislatura tenía que ver con el museo de la Semana Santa. También en este caso dijo que si llegaba a la Alcaldía, las cofradías contarían con uno, pero salvo que se incluya una partida en los presupuestos del 2021, no parece que vaya a hacerse a corto plazo.

Hay que tener en cuenta que los proyectos de calado tienen que comenzar ya si quiere verlos finalizados en su legislatura. Quizá por eso, porque esto no sucederá, obvió qué pasará con la reforma de La Romareda.

Esta semana la concejala de Hacienda, María Navarro, iniciará una ronda de contactos con los grupos de la oposición para recabar sus propuestas y ver si tienen encaje en su borrador. Puede que entonces, con el borrador aprobado, sí que mencione los planes integrales de Las Fuentes, San José y Delicias, la extensión de la cota cero por el centro de la capital o el futuro de la explanada de la Estación del Norte.

Por ahora solo se sabe que las plazas Santa Engracia y Salamero pasarán a mejor vida. En el primer caso, su reforma ya ha comenzado, mientras que la de Salamero sigue a la espera de los informes técnicos que desvelen los motivos por lo que cedió el techo, de quién es la responsabilidad y qué se puede hacer.

El alcalde defendió que su primer año y medio al frente de la ciudad han logrado «desatascar» proyectos como la urbanización de la factoría Averly, la viviendas y la ampliación del parque Pignatelli (en licitación), el párking y la plaza del Bruil, el soterramiento de la línea de alta tensión de Parque Venecia, el acondicionamiento de la antigua fábrica de Giesa (pero no qué se va a hacer en ella) o la ampliación de Tenor Fleta. proyectos que vienen de lejos pero que, cierto es, ha logrado impulsar.

MAPA CON QUEJAS

Catorce mapas interactivos diseñados por el Ayuntamiento de Zaragoza geolocalizan desde ahora las propuestas de los vecinos para mejorar los barrios de la capital aragonesa. Este proceso de participación se ha realizado en colaboración con la Unión Vecinal Cesaraugusta que, con las aportaciones de 27 asociaciones de vecinos, ha elaborado un estudio muy detallado de los defectos encontrados en las calles. Los mapas interactivos pueden consultarse en el portal web de Gobierno abierto y recogen las propuestas vecinales de ocho distritos urbanos y seis barrios rurales en asuntos relacionados con la iluminación, accesibilidad, señalización, servicios, movilidad, limpieza o medio ambiente, entre otros. En el barrio de las Delicias, por ejemplo, hay varias alertas cerca de la plaza Huesca por suciedad en las aceras o por la estrechez de las mismas.

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