Un vigilante de seguridad del residencial Hernán Cortés de Zaragoza fue agredido en la plaza de Mariano Arregui Canela la noche del pasado sábado 5 de diciembre por un joven que se encontraba en las inmediaciones haciendo botellón junto a un grupo de unas catorce personas.
Según pudo conocer esta redacción, el vigilante se dirigió a los jóvenes, con edades comprendidas entre los 20 y los 25 años, para advertirles de que no se podía hacer botellón y que debían llevar la mascarilla puesta. La mayoría abandonó el lugar pero cuatro de ellos se dirigieron a él. Uno de ellos le agredió y le propinó varios puñetazos.
La víctima interpuso una denuncia ante la Policía Nacional, tal y como aseguran desde la comunidad de vecinos, y actualmente se encuentra de baja laboral, ya que al reducir al agresor, sufrió un golpe que le provocó la rotura de un gemelo. Según explican, los responsables fueron identificados por la Policía Local en la calle Doctor Cerrada, ya que la Nacional le comunicó al agredido que no tenían efectivos en ese momento.
Sin embargo, los cuatro jóvenes volvieron al lugar de los hechos para buscarle. Un vecino les escuchó desde su casa diciendo «¿dónde estás, rata?», y llamó seguidamente a la Policía.
«Esta plaza a veces es conflictiva», lamenta el presidente de la comunidad, ya que ya son dos las agresiones a vigilantes y numerosas las amenazas, incluso de muerte. Varios vecinos desconocían el suceso, pero aseguraron que son constantes los botellones y la presencia policial en las cercanías a la biblioteca de Aragón por la noche. Debido a los numerosos incidentes, la comunidad ha decidido reforzar en determinadas horas la presencia de vigilantes de seguridad, con más de un efectivo.
