Comenzó siendo una medida excepcional, una propuesta de la Asociación de Cafés y Bares de la provincia de Zaragoza para tratar de esquivar las restricciones de aforo decretadas como consecuencia de la crisis del coronavirus. Las plataformas en calzada se han convertido en la salvación de muchos hosteleros y en una nueva modalidad de veladores en la capital aragonesa. Este tipo de terrazas, adaptadas al espacio y de dimensiones coquetas, comenzaron a aparecer por el centro de la ciudad a principios de verano y ahora ya hay 230 repartidas por todos los barrios.

El ayuntamiento firmó las primeras autorizaciones para crear plataformas únicas en la calzada en junio con dos objetivos: que los establecimientos sin espacio en las aceras pudieran montar sus terrazas en la calzada y que aquellos con licencia pudieran aumentar la superficie y el número de mesas.

Entonces no eran muchas las solicitudes que llegaban al área de Servicios Públicos. En el primer paquete de peticiones se dio luz verde a la petición de once bares, mientras que ayer, seis meses después, el equipo de Gobierno de PP-Cs ha aprobado 70 licencias, que suman las 230 que ya hay repartidas por todos los distritos.

Desde el verano, Servicios Públicos no ha parado de recibir peticiones. Durante los primeros meses se concentraron en el centro de la ciudad y poco a poco se han ido extendiendo al resto de los barrios, ha destacado la responsable del área, Natalia Chueca, alardeando del éxito de esta medida.

TRES TIPOS DE TERRAZAS / Ha sido tal que esta modalidad se ha incluido en la nueva ordenanza reguladora de la instalación de terrazas de veladores que va a someterse a exposición pública antes de su aprobación definitiva. Pero la norma ya lleva tiempo en vigor mediante una instrucción emitida por Servicios Públicos con la que pretendían dar seguridad jurídica a los hosteleros que decidieran invertir de cara a la temporada invernal.

El texto incluye tres tipos de terrazas: protegidas, integradas y las plataformas en calzada. Cada una tiene sus peculiaridades pero todas deben cumplir con una serie de requisitos estéticos fijados en la nueva ordenanza. Una condición para conseguir el aval de Servicios Públicos con la que el consistorio pretende que la hostelería de la ciudad presente una imagen unificada y armonizada. Lo que ha hecho el ayuntamiento ha sido estandarizar el mobiliario, de manera que las sombrillas, toldos, cortavientos o las jardineras, además de cualquier elemento decorativo, tendrán que seguir una misma gama cromática.

EN LA CALLE PERO CLIMATIZADAS / Con la nueva ordenanza se consolidan las terrazas en la calzada, que tendrán un límite de 15 metros lineales y seis en batería, siempre que las aceras tengan más de 1,5 metros de anchura.

Las terrazas integradas podrán estar completamente cerradas por cristaleras, aislando así a los usuarios de las inclemencias del tiempo y climatizando el espacio. En este caso, además de la licencia de apertura se requerirá de una urbanística ya que los elementos de protección tendrán que ir anclados al suelo e incluso requerirán de alguna obra menor para instalar las pérgolas, marquesinas o similares, que deberán ser desmontables. Las terrazas protegidas podrán utilizar mamparas, paravientos y toldos e instalar climatización, como calefactores o estufas. Todos los elementos tendrán que ser móviles y desplazables.

Según la concejala, la ordenanza será más flexible y ofrecerá al hostelero mayor libertad conforme a sus necesidades. Ahora se inicia el trámite administrativo con la apertura del periodo de 15 días de presentación de alegaciones, por lo que la normativa municipal podría entrar en vigor en tres o cuatro meses. Chueca aseguró que todos los empresarios que han iniciado inversiones en la calzada tienen seguridad jurídica de que lo que hagan ahora servirá a futuro.