Hace meses que el método del alcantarillazo, empleado para romper escaparates y así poder entrar en establecimientos donde robar, no se estaba empleando en Zaragoza. Sin embargo, entre la última noche del año y otras dos siguientes del presente la Policía Nacional ha detenido a ocho jóvenes por usarlo. El último arresto tuvo lugar este domingo: dos chicos de 14 años que lo intentaron en una peluquería y en una tienda perteneciente a la cadena Panishop en el barrio Delicias.

En todos los casos, la rápida actuación policial hizo que ninguno de los asaltos llegara a producirse porque fueron sorprendidos. El primero de los hechos sucedió el último día del 2020, a las 03.15 horas de la madrugada, en la calle Desiderio Escosura. Los agentes del Grupo de Atención al Ciudadano de la Jefatura Superior de Policía de Aragón, mientras realizaban labores propias de prevención de la delincuencia, observaron a un joven en actitud vigilante y agazapado entre dos vehículos. Al ser pillado, este hombre gritó a sus dos compañeros de batallas que se encontraban en las inmediaciones con una alcantarilla para fracturar el escaparate de una tienda de telefonía. Iban también provistos de guantes y pasamontañas.

Aunque lo intentaron, no pudieron ir muy lejos, siendo arrestados S. H. de 24 años; A. Y. y M .A. ambos de 18 años, de origen marroquí y con numerosos antecedentes por hechos de la misma naturaleza, también cuando eran menores.

En un bar

La segunda intervención se produjo en Vía Univérsitas, sobre la media noche del día 1 de enero. En esta ocasión, el 091 alertó a las patrullas en servicio que se podría estar cometiendo un robo con fuerza en un bar. Hasta allí se trasladaron de forma inmediata varias patrullas del Grupo de Atención al Ciudadano y de la Unidad de Prevención y Reacción (UPR), que permitió nuevamente frustrar otro robo con fuerza, sorprendiendo en el interior del establecimiento hostelero a dos jóvenes y a un tercero en el exterior.

En ese momento procedieron al arresto de A. F. M.; W. L. A. R. de 22 y 18 años respectivamente y de origen marroquí y un menor extranjero no acompañado de 17 años, quienes pasaron a disposición judicial por estos hechos, siendo puestos en libertad.

Ayer, sobre las 00.00 horas fue la última actuación de similares características llevada a cabo por la UPR. Fue en una peluquería situada en la calle Doctor Julián Sanz y en una panadería situada en la calle José Gervasio Artigas. En el centro de belleza intentaron romper el escaparate, pero el cristal blindado se lo impidió. Lo intentaron en el Panishop pero el ruido que ocasionaron con la alcantarilla alertó a los vecinos que llamaron al 091, siendo arrestados in fraganti.