La llegada de la borrasca Filomena ha supuesto un reto a la hora de garantizar los accesos a Santa Eulalaia. Pero no será nada comparado con el mes que les espera a los vecinos de la población debido a la reparación del viejo puente de hierro para superar el río Gállego que les separa de la localidad de Ayerbe. Esta vieja infraestructura en la carretera A-1202 presenta numerosas deficiencias por lo que se va a acometer una reparación integral que suprimirá la circulación durante al menos un mes. Desde el consistorio se ha solicitado que se instale un paso provisional aprovechando la poca profundidad del cauce, pero por el momento las negociaciones con la Delegación del Gobierno han sido vanas.

El puente de Santa Eulalia (o Santolaria, según su nombre en aragonés) es una infraestructura muy deteriorada que solo permite el paso de un vehículo cada vez. Por eso el alcalde de la población, José Antonio Casaucau, manifiesta que esta será una buena oportunidad para mejorar la seguridad del trazado de ocho kilómetros que les separa de Ayerbe, la localidad de referencia para el centenar de habitantes a la hora de realizar compras.

EMERGENCIAS / Mientras siguen las negociaciones para la puesta en marcha de un pontón que permita mantener el paso por carretera, las previsiones solo contemplan mantener la circulación de peatones. Con la dirección general de Carreteras del Gobierno de Aragón se ha pactado la creación de un aparcamiento que facilite el intercambio de vehículos. Eso implicar conducir los casi dos kilómetros que separan Santa Eulalia del río, caminar hasta el otro lado por el viejo puente de los años veinte, y cambiar de vehículo para continuar la ruta. Una forma de proceder para la que ya se ha alertado a la población a través de un bando al tiempo que se ha recomendado mantener las despensas bien abastecidas.

Sin embargo, esta no es la solución preferida para el regidor, pues complicará las acciones en el caso de emergencias. Sobre todo porque se da la casualidad de que una de las vecinas está embarazada y calcula que podría dar a luz durante el periodo en el que estará cerrada la circulación. El abastecimiento de las tiendas, la llegada del correo, la llegada del médico y otros servicios también se organizarán teniendo en cuenta que solo se permitirá el paso peatonal.

La carretera que une Santa Eulalia con Biel en dirección a la provincia de Zaragoza también está en mal estado, sobre todo tras las últimas tormentas de nieve, e implica un rodeo de 97 kilómetros hasta llegar a una población de mayor tamaño. La situación a la que se verán obligados los vecinos recuerda a la de Sástago durante la restauración de su puente.

SIN INTERNET / Casaucau señala que este periodo provocará muchas molestias en la población, pues en el núcleo viven bastantes familias jóvenes y es necesaria la movilidad, sobre todo entre los agricultores. Las rutas escolares también se organizarán de forma que los alumnos lleguen hasta la entrada del puente para ser recogidos por el autobús tras atravesarlo caminando.

Las obras tienen un coste de previsto de unos 94.000 euros y se podrían alargar casi dos meses mientras se recupera la cobertura de asfalto y hormigón del tablero. También se volverán a pintar los arcos de hierro y se adecuará su entorno.

Esta complicación asociada a la reparación del puente no es la única a la que están teniendo que hacer frente en estas últimas semanas. Con la llegada de Filomena el municipio ha pasado dos jornadas sin internet y sin televisión debido a la avería en el tendido eléctrico.