El parque Torre Ramona, en el barrio de Las Fuentes, se inauguró en 1983. Tiene 47.938 metros cuadrados, casi nada, y sus vecinos quieren que esté perfecto. Verde primaveral los 365 días del año. Cuidado con mimo. Con un mobiliario en condiciones y, claro está, con la capilla que da nombre a este pulmón verde de Zaragoza rehabilitada, ahora que el consistorio la ha incluido en el catálogo de Edificios y Conjuntos de Interés Histórico Artístico. Es el icono del barrio, una reliquia golpeada por los años y el abandono.

«Nos ha sorprendido que el ayuntamiento no haya incluido en los presupuestos ni un euro para adecuarla», explica Diego Luque, de la Asociación de Vecinos de Las Fuentes. «Si la catalogaron será por algo», prosigue el representante vecinal que si hoy se sentara frente al alcalde, Jorge Azcón, y pudiera pedirle lo que quisiera resumiría sus reclamaciones en dos. «Le solicitaría que terminaran las obras en el parque Torre Ramona y que destinase una partida para finalizar la orla este del barrio (que serviría de prolongación del parque)», explica. Todo gira entorno a esta gigantesca zona verde en la que el año pasado el ayuntamiento invirtió un millón de euros para renovar el eje central y mejorar la accesibilidad.

Pero hay vida más allá. Según explica, Las Fuentes es un barrio próximo al centro y está conectado con las líneas de bus 22 y 30, y ve más lejos que nunca ese eje este-oeste de alta capacidad que les iba a conectar con delicias, ahora que la línea del tranvía la descarta el consistorio. En materia de movilidad, el problema de los vecinos no tiene que ver con el transporte público, más bien con los vehículos privados. «Aquí hay muchos edificios sin garaje y las familias no se conforman con un único coche, por lo que tenemos muchos problemas para aparcar», afirma.

Pero hay solución porque el barrio tiene multitud de solares vacíos que, con una pequeña inversión, podrían adecuarse y descongestionar las calles. Aunque eso sí, la mayoría están al final del distrito, junto al tercer cinturón.

Estacionamiento regulado

La alternativa prevista por el consistorio para solucionar este problema, que por otra parte afecta a otros tantos barrios, pasa por colorear las calles de azul y naranja. «Nos dicen que el estacionamiento regulado permitirá una mayor rotación de vehículos y que será más sencillo aparcar, pero desde Las Fuentes ya hemos manifestado en más de una ocasión que estamos en contra. No queremos que nos obliguen a pagar para poder dejar nuestros coches», critica.

Sí que están a favor de que se peatonalicen algunas de sus calles. Por ejemplo, desde la entidad vecinal sugieren que se actúe en Leopoldo Romeo, Monasterio de Siresa, Doctor Iranzo y Salvador Minguijón. «Sería un buen lugar para expandir la cota cero, aunque la propuesta tendría que estar consensuada con el comercio porque esto no puede repercutir en sus ventas de forma negativa», añade Luque, en defensa del comercio de barrio de toda la vida.

Ya puestos a meter las máquinas, según el representante vecinal habría que incluir en la operación asfalto «sí o sí» la calle Rodrigo Rebolledo. «Es una de las que peor está», asegura, «aunque nuestro principal problema son las intersecciones, los pasos de peatones, que están hechos un desastre, con baches en la calzada», prosigue. No obstante, dice que le consta que el consistorio tiene previsto solucionar este asunto. «Tendremos que verlo», puntualiza.

También en las aceras concentran otro de los asuntos a tratar con el ayuntamiento: los alcorques vacíos con tocones que ocupan la mitad de la calzada. «Solo hay que pasarse por la calle Jorge Cocci para entender de lo que hablo, que en una acera de dos metros el alcorque se come la mitad y uno no puede pasar ni con un carrito de bebé», explica.

Luque admite que en el barrio cada vez quedan menos jóvenes. «No hay vivienda nueva, y la que hay es muy cara y eso genera dificultades para que las generaciones que se criaron en Las Fuentes puedan volver». Según dice, sería necesario que se construyeran más edificios destinados al alquiler social y con precios asequibles para los jóvenes, como el de Fray Luis Urbano, cuyas obras se han vuelto a retomar tras el parón de varios meses.

«Entre Montemolín y Las Fuentes hay nuevas construcciones, pero son para rentas más altas. Es como la zona vip que contrasta con los edificios de toda la vida del barrio o los grupos sindicales», añade el representante vecinal que propone que se opte por construir pisos sociales en el solar como aparcamiento que ahora se utiliza junto al antiguo reformatorio del Buen Pastor. Una explanada en la que los vecinos también reclaman que se cree un pabellón que daría servicio a los colegios e institutos de la zona. «De equipamientos vamos bien, pero si que es verdad que en esta zona se podría levantar un pabellón con pistas deportivas para que los estudiantes tengan un lugar cubierto en el que realizar las extraescolares o practicar deporte».

LAS PRINCIPALES DEMANDAS

1- Más zonas para aparcar pero sin tener que pagar

Los vecinos de Las Fuentes comparten el mismo problema que otros barrios como El Rabal o San José: la falta de aparcamiento propia de los distritos en los que los edificios son antiguos y carecen de garajes particulares. Desde la asociación vecinal sugieren que se adecuen los salares que hay junto al tercer cinturón para estacionar los coches. Esta opción permitiría desahogar las calles de vehículos y agilizaría la rotación. Desde la entidad rechazan la propuesta del área de Movilidad de crear zonas de estacionamiento regulado. «Estamos radicalmente en contra, no creemos que la solución sea cobrar a los vecinos por aparcar sus coches», señalan desde la asociación de Las Fuentes, que señala habría que fomentar las políticas que permitan depender menos del coche.

2- La capilla de Torre Ramona, icono del barrio

Dicen que es una «reliquia», un «icono» del barrio. La capilla de Torre Ramona, que da nombre al gigantesco parque en el que se encuentra y que se incluyó en el Catálogo de Edificios y Conjuntos de Interés Histórico Artístico del Ayuntamiento de Zaragoza, lleva un sinfín de años esperando ser rehabilitada. Sería la única forma de poder lucir este patrimonio. Sin embargo, desde la Asociación de Vecinos de Las Fuentes lamentan que el proyecto de presupuestos del Ayuntamiento de Zaragoza no haya incluido ninguna partida para reformarla y recuperar su esencia. Los vecinos llevan años reclamando una actuación y, al menos, en el 2019 lograron que se catalogara. De este modo tienen asegurado que no se derribe como puede suceder con el resto del antiguo reformatorio.

3- Nuevas construcciones pero libres

Desde la Asociación de Vecinos Las Fuentes aseguran que la falta de vivienda nueva y, sobre todo, asequible, está provocando que los jóvenes o no se quieran quedar o que no puedan volver. Por este motivo, reclaman nuevas construcciones para pisos sociales o alquileres adaptados a los recursos de los jóvenes. Es lo que se está haciendo en la calle Fray Luis Urbano, donde ya en la anterior legislatura, con Zaragoza en Común, se inició la construcción de un edificio revolucionario, con espacios compartidos y pisos de menor tamaño. Desde la entidad vecinal reclaman que esta fórmula se extienda a más zonas del barrio y que el ayuntamiento utilice sus solares para seguir ampliando el parque de alquiler social. Es la manera más segura de conseguir que los jóvenes no se marchen.

4- Bienvenida la cota cero y la mejora urbana

Ahora que el equipo de Gobierno de PP-Cs en Zaragoza tiene previsto impulsar la cota cero, los barrios piden que se cuente con ellos. Es el caso de Las Fuentes, que sugiere que se peatonalicen las calles Leopoldo Romeo, Monasterio de Siresa, Doctor Iranzo y Salvador Minguijón. Eso sí, siempre que se cuente con la opinión de los comerciantes de la zona y que estén conformes, ya que desde la asociación vecinal consideran que ninguna actuación debe perjudicar a los comercios. De todos modos, matizan, están abiertos a estudiar la peatonalización de otras calles siempre que se mejore la escena urbana, se limite el tráfico rodado y el peatón vuelva a recuperar el espacio en un barrio en el que se hace mucha vida en la calle. Por otro lado, reclaman que se adecuen los pasos de peatones.

5- Equipamientos pendientes, como el deportivo

Aunque en Las Fuentes aseguran que van «bien servidos» en lo que a equipamientos se refiere, la entidad vecinal sí que reclama que se construya un pabellón deportivo en la explanada que se encuentra junto al antiguo reformatorio del Buen Pastor y que ahora se utiliza como aparcamiento. Según indican, ese terreno permitiría levantar un pabellón que diera servicio a los colegios e institutos del barrio. Según el presidente de la Asociación de Las Fuentes, Diego Luque, sería necesario que se crearan más pistas deportivas para los chavales del distrito y espacios de convivencia, más ahora que, fruto de la crisis sanitaria, se reclaman grandes superficies y al aire libre para poder disfrutar de un ocio seguro. Este proyecto exigiría la aprobación de DGA y ayuntamiento por la titularidad de los suelos.