El coronavirus ha condicionado por completo la operativa de Mercazaragoza. A pesar de todo, la mayor despensa agroalimentaria del valle del Ebro ha jugado un papel fundamental en la crisis sanitaria y ha capeado los efectos económicos de esta con unas cifras de actividad razonables. En el 2020, alcanzó las 154.730 toneladas comercializadas de frutas y verduras, pescados y carnes, lo que supone un descenso global del 14% con respecto a las 179.720 del 2019, es decir, casi 25.000 toneladas menos de productos. Así se desprende de los datos provisionales facilitados a este diario por la sociedad pública, que está participada por el ayuntamiento (51%) y la empresa estatal Mercasa (48,8%).

La caída es consecuencia directa del desplome de la demanda del sector de la hostelería, que ha funcionado de manera renqueante en el último año y llegó a sufrir un cierre general en el primer estado de alarma. No obstante, la bajada del llamado canal Horeca se ha visto compensada en parte por el mayor consumo en los hogares, lo que ha impulsado con carácter general las ventas de los comercios minoristas de alimentación.

La gran plataforma de la alimentación fresca, que tiene el tamaño de 70 campos de fútbol, ha sido clave en todo este tiempo. Más de 6.000 personas han seguido desarrollando su trabajo a diario dentro de esta infraestructura estratégica, que ha estado funcionando a pleno rendimiento desde el estallido del virus, también en los meses mas duros del confinamiento, para ofrecer un servicio esencial como es el abastecimiento de comida.

Al nivel del 2016

En el caso de las empresas mayoristas de frutas y verduras, que suponen casi el 60% de volumen total de alimentos que mueve Mercazaragoza, se produjo un descenso aproximado del 10%, hasta las 110.000 toneladas frente a las 121.069 del 2019, es decir, 11.000 menos. Esta cifra es similar a la registrada en el 2016 (110.311) y se sitúa por encima de la del 2017 (107.521).

En este segmento se observa además un incremento importante de las ventas realizadas por parte del grupo de hortelanos, que crecen en volumen un 75%, hasta casi las 2.600 toneladas, frente a las 1.484 del ejercicio precedente. «Entendemos que es debido a un aumento de las ventas en el comercio detallista consecuencia de un aumento del consumo en los hogares», explicaron desde Mercazaragoza.

El mercado de carnes, el segundo más importante, registró un descenso del volumen de sacrificio del 13%, hasta las 20.000 toneladas, lo que se vincula igualmente al retroceso del consumo en el canal Horeca y a una limitación del trabajo en los mataderos debido al cumplimiento de medidas preventivas anticovid.

Más venta de marisco

En la misma línea, la venta de pescado fresco y marisco se situó en 20.887 toneladas, 11% menos en comparación con el 2019 (23.397). Pero el comportamiento interno en esta categoría ha sido muy desigual. En concreto, la caída llegó al 17% en el pescado fresco, o lo que es lo mismo, en torno a 3.000 toneladas menos, al pasar de 19.262 del 2019 a unas 16.000. Esta merma parece deberse también al cierre de la hostelería, tras un año de «variaciones estacionales que están pendientes de analizar en profundidad», señalaron desde Mercazaragoza.

El marisco, en cambio, sí aumentó el volumen comercializado, con una subida del 18%, hasta casi 4.900 toneladas frente a las 4.133 del año anterior, lo que podría estar relacionado con la campaña navideña, punto fuerte del mercado año tras año, y a la circunstancia de que las fiestas se hayan celebrado principalmente en casa.

En consonancia con los descensos en los volúmenes de comercialización de las empresas mayoristas, también se detectó una menor afluencia de vehículos. En el 2020, Mercazaragoza recibió de media cada día 4.548 camiones, furgonetas y turismos, lo que representa una caída del 6% en relación a los 4.870 del 2019.

Balance positivo

«El 2020 ha sido un año inesperado en el que hemos comprobado la capacidad y adaptabilidad de las empresas que operan en Mercazaragoza», señalaron desde la sociedad pública, que desde hace un año y medio dirige Sergio Alarcón. «Hemos trabajado mejorando nuestra eficacia y agilidad para resolver circunstancias y momentos cambiantes a lo largo del año», recalcaron.

En este sentido, los gestores de la plataforma logística zaragozana pusieron en valor la «profesionalidad y compromiso de las personas, empresas y entidades» que trabajan en estas instalaciones para «seguir cumpliendo nuestra misión: ser la despensa de todos los aragoneses», en unos años que nadie olvidará jamás.