Los sindicatos aragoneses volverán a las calles el Primero de Mayo. UGT y CCOO han convocado manifestaciones por todo Aragón con motivo del tradicional Día Internacional del Trabajo, algo que no pudieron hacer en la cita de pasado año por las restricciones de la pandemia. El objetivo que se marcan es recuperar la demandas más acuciantes que aparcaron por la crisis sanitaria y presionar al Gobierno de España para que cumpla sus compromisos electorales sobre las reformas del ámbito laboral, pensiones, desempleo o fiscalidad.

«Es el momento de volver a la agenda social», recalcó Daniel Alastuey, recién reelegido secretario general de UGT Aragón en la rueda de prensa ofrecida este martes para presentar los actos de la jornada de movilizaciones, que este año tiene como lema Ahora toca cumplir. «No nos hemos olvidado de nuestras reivindicaciones, siguen absolutamente vigentes. Las habíamos aparcado para negociar lo más vital», precisó. «Queremos volver a las calles con medidas controladas y que cumplan lo que marcan las autoridades sanitarias», apuntó Manuel Pina, su homólogo en CCOO.

La subida del salario mínimo interprofesional (SMI) es uno de los principales reclamaciones, algo que Alastuey consideró prioritario «para no dejar a atrás a los más vulnerables». «Es una cuestión sangrante que afecta a los sectores que menos cobran y que peor lo pasan», criticó Pina, quien recordó que el resto de países de Europa sí han aplicado incrementos.

También exigen al Ejecutivo de coalición formado por PSOE y Podemos que «cumpla» su programa y acometa la derogación de las reformas implantadas por el Gobierno de Rajoy en lo laboral —que se hizo «para devaluar salarialmente nuestro país»— y en pensiones. A estas demandas, que ya se vienen pidiendo desde febrero en las concentraciones que UGT y CCOO celebran el día 11 de cada mes a nivel nacional, se sumarán otras como la reactivación de las políticas activas de empleo, un nuevo sistema de desempleo que eleve la cobertura de los parados con prestación —ahora es del 51%— o fortalecer los servicios públicos, así como una ley de igualdad salarial y un plan de choque contra la siniestralidad.

Los que evitaron que el país se paralizara

«Es el momento de recuperar la calle», insistió el líder ugetista, tras recordar a las víctimas del covid y poner en valor a los trabajadores que han sido esenciales, pero «no solo los que se califican como tales, sino todos los que han contribuido a mantener la vida del país, sobre todo en los primeros meses» de la pandemia. «Hicieron que el país no se paralizara, pese al confinamiento», agregó. En este sentido, ambos sindicatos destacaron la dureza del último año, en el que han estado dedicados fundamentalmente a negociar con los distintos gobiernos medidas «para salvaguardar la salud, los empleos, las empresa y las personas».

Sobre los fondos europeos para la reconstrucción 'Next Generation’, Pina abogó por aprovecharlos para «transformar el modelo productivo y económico», lo que requerirá de un marco laboral «más moderno, con más derechos y mejores condiciones», algo que tienen que estar «en el cogollo de la aplicación y gestión» de estas ayudas.

El líder de Comisiones reprochó a las organizaciones empresariales que, tras el «esfuerzo brutal» hecho por la Administración para sostener el tejido productivo, «pidan la reducción de impuestos o digan que no se pueden subir los salarios». «No sé si algún empresario se cree que el dinero llueve del cielo y si solo pretenden que salga de la mayoría social, de los trabajadores», inquirió, por lo que instó a las patronales a que tengan responsabilidad social.