Los trabajos de restauración de la portada norte de la iglesia de El Salvador de Ejea de los Caballeros comenzarán las próximas semanas. La Dirección General de Patrimonio Cultural del Gobierno de Aragón destina 180.000 euros a estas actuaciones, que tendrán un plazo de ejecución de 6 meses, por lo que se prolongarán hasta principios de noviembre.

Una parte del citado presupuesto se destinará a la restauración de la portada propiamente dicha y la otra a la instalación de una protección que garantice que los elementos recuperados no se vean afectados por los agentes medioambientales que hasta ahora han acelerado su deterioro.

La intervención, que impulsa la Dirección General de Patrimonio, va a consistir en la limpieza, consolidación y fijación tanto de la piedra como de los morteros y las policromías que componen la portada. Estas actuaciones llevarán aparejada una importante labor de documentación, así como diversos estudios de materiales, cuyos resultados se plasmarán en una memoria final de los trabajos realizados, que incluirá también un plan de mantenimiento y conservación preventiva para el futuro.

Una vez acabada la restauración, se montará la citada protección para garantizar que la portada no se vean afectada por los agentes medioambientales, aunque también permitirá una contemplación integral de los elementos, ya que está previsto instalar una estructura ligera, realizada en vidrio con finos perfiles metálicos y un tejadillo de zinc, que respetará plenamente los valores históricos, estéticos y simbólicos, así como su funcionalidad e incorporará un cuidado sistema de iluminación y otro antiaves. A fines del 2021 la portada norte de la iglesia del Salvador de Ejea de los Caballeros podrá contemplarse totalmente restaurada, protegida y realzada.

Románico tardío

La iglesia de El Salvador fue declarada monumento histórico-artístico --hoy bien de interés cultural, en la categoría de monumento-- en 1931. Fue construida entre finales del siglo XII y principios del siglo XIII en estilo románico tardío con algunos elementos góticos y renacentistas.

Es un edificio realizado en sillería de piedra arenisca de excelente talla, que presenta nave única de cuatro tramos con capillas laterales y ábside poligonal. La transición al gótico se observa en la bóveda central, de cañón muy apuntado, y en la bóveda nervada del ábside.

Mientras, las capillas laterales abiertas entre los contrafuertes, y que son fruto de una ampliación del siglo XV, se cubren con bóvedas de distintos tipos. Al exterior, el templo muestra un aspecto fortificado debido al remate almenado de la nave y a la tipología del torreón noroccidental con matacanes y garitones. Su robustez arquitectónica contrasta con la delicadeza de la decoración figurada de sus dos portadas esculpidas.