Ni estanterías, ni mostradores ni dependientes. Así es el modelo de negocio de Supermercados Mere, bautizado coloquialmente como el Lidl ruso, que ha iniciado este año su expansión en España y que tiene como objetivo asentarse en 40 ciudades españolas en este 2021. Y entre ellas está Zaragoza, según aseguraron a este diario fuentes del departamento de comercialización, donde explicaron que están «buscando una ubicación que sea apetecible». Su principal requisito es el coste. El espacio siempre cumple unos estándares fáciles de encontrar para abrir las puertas de una tienda que tiene como gran atractivo los precios, que llegan a situarse un 20% por debajo de los del mercado.

Mere es la marca comercial tras la que se encuentra el operador ruso de hard discount Svetofor, y que en solo 12 años de actividad ha logrado hacerse un nombre en el sector de la distribución alimentaria. Ahora está sondeando el mercado y Zaragoza no es su única referencia donde buscar en Aragón, ya que el perfil pretendido es el de «cualquier ciudad con más de 15.000 habitantes». En la comunidad tampoco hay tantas localidades que entren en esa horquilla, pero todas ellas están en su radio de acción. Eso sí, las condiciones económicas para alquilar esa planta baja o nave donde instalarse, no han trascendido. Solo los destinos donde ya ha cerrado un acuerdo. 

La peculiaridad de sus tiendas está en un diseño basado en la colocación de palets o cajas en los que situar el surtido de sus productos, por lo que apenas requiere de muchas obras para subir la persiana. Es un concepto conocido como no-frills (se traduce como sin florituras) que es en el que reduce al máximo los costes de explotación y, a continuación, los repercute en precios muy competitivos. Ofrece alimentación pero también bazar. Como el Lidl que todos conocen en España. H