El Grupo Parlamentario de Ciudadanos (Cs) en las Cortes de Aragón, ha reclamado al Ejecutivo autonómico que permita la apertura de los establecimientos de ocio nocturno hasta las dos de la madrugada con el objetivo de permitir trabajar a un sector muy castigado por la pandemia y, al mismo tiempo, evitar las celebraciones sin medidas sanitarias en domicilios o en las calles.

La portavoz de Industria de Ciudadanos, Jara Bernués, ha explicado que, tras el fin del toque de queda, estos establecimientos son una ayuda para evitar las fiestas en viviendas particulares o la celebración de botellones en las calles.

"Ciudadanos siempre ha defendido que la hostelería es parte de la solución. Nunca han sido el problema y llevan 400 días sin poder trabajar. La prioridad es cuidar de la salud y ahora tenemos que trabajar para salvar empleos, por lo que la hostelería nos puede ayudar a ambas cosas", ha incidido.

Bernués ha recordado que la hostelería ha demostrado que sabe cumplir las normas y trabajar con profesionalidad y rigor, por lo que pueden flexibilizarse los horarios para que la ciudadanía pueda disfrutar de estos establecimientos regulados y evitar así otro tipo de celebraciones sin medidas sanitarias.

Asimismo, la diputada ha subrayado "el apoyo decidido" de Ciudadanos a la hostelería durante toda la pandemia, y ha expuesto que la formación liberal fue quien reclamó que el ocio nocturno fuera considerado establecimiento turístico para poder acceder a las ayudas del Gobierno de Aragón, y quien pidió que pudieran trabajar sus terrazas con licencia de cafetería y evitar así una mayor destrucción de empleo y cierre de negocios.

"Junto a otras instituciones aragonesas como los ayuntamientos de Teruel y Zaragoza estamos haciendo hincapié en la importancia de tener en cuenta la calidad del aire como criterio fundamental para determinar aforos", ha apostillado. Bernués ha apuntado que "existe una plataforma nacional respaldada por más de 100 científicos que también está pidiendo que esto se tenga en cuenta porque las restricciones de aforo que tanto han perjudicado a los hosteleros no tienen base científica".