Huesca y Teruel prevén pocos cambios en su movilidad a pesar de la entrada en vigor del nuevo reglamento que establece la pacificación del 70% de las vías de las ciudades españolas a 30 kilómetros por hora (km/h). El motivo es que ambas ciudades ya tomaron la delantera en este sentido, con zonas peatonalizadas y pacificadas, lo que da como resultado a su vez una tasa de siniestralidad baja. Por eso, los responsables de movilidad de ambos consistorios señalan que no se prevé un gran impacto en este sentido.

«En Huesca habrá muy poca afección porque la mayoría de las vías ya están pacificadas», explicó Beatriz Rivas, intendente de la Policía Local de la capital oscense. «La zona peatonal del casco histórico ya está limitada a 20 km/h, la mayoría de vías de la ciudad son de un único sentido y cuentan con badenes o rotondas, y ya tenían la velocidad reducida», añadió.

De hecho, en toda la ciudad se estableció hace tiempo una velocidad genérica de 40 km/h, de 30 km/h en las vías ciclables y de 20 km/h en la zona peatonal. «Solo la ronda sigue a 50 km/h», indicó Rivas, que aseguró que en esencia el conductor oscense «no va a notar los cambios». Tampoco prevé que se tengan que poner más multas. «Ni va a afectar a la siniestralidad, porque ya la tenemos muy baja y el verdadero impacto se produjo con la peatonalización, ni a las denuncias, porque los conductores se han ido adaptando de forma paulatina a esta velocidad», incidió Rivas.

Para la intendente de la Policía Local en Huesca una de las claves es que la ciudad es «singular» por su propia estructura, «con un máximo de dos carriles por vía, rotondas y badenes, que ya de por sí hacen que la velocidad sea más baja de media», expresó. «La propia estructura de la ciudad invita a la pacificación», insistió. Uno de los cambios visibles será, eso sí, la modificación de la señalización en la entrada, donde los carteles pasarán de indicar 40 km/h, a 30.

En Teruel, la concejala responsable de Movilidad, Ana Oliván, explicó que «pasan a 30 km/h casi la totalidad de las vías de la ciudad». En el mismo día en el que entra en vigor la nueva normativa de circulación, el Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana (Mitma) avaló la propuesta del consistorio turolense para que la velocidad se reduzca a 30 km/h en todos los sentidos de la avenida de Sagunto y de la ronda de Ambeles, que por ley debería seguir en 50 km/h. El objetivo era «pacificar» la zona, con «una alta densidad de tráfico, por las viviendas, colegios y servicios en el entorno», indicó Oliván.

Así, los únicos puntos en los que la velocidad se mantendrá a 50 km/h en Teruel serán la vía perimetral de barrios Manuel Pertegaz y el tramo de la avenida Sagunto, desde Dinópolis y hasta la rotonda de los lápices, «donde hay una menor densidad de viviendas, colegios y en definitiva, menos tráfico», señaló Oliván. El mantenimiento de la ronda a 50 km/h, añadió la concejala, servirá para que esta vía «contribuya a descongestionar el tráfico de la ciudad».

Estos cambios supondrán que «la ciudad se organizará de una forma más ordenada y segura», afirmó Oliván, que recordó que «al reducir la velocidad se reduce la posibilidad de tener lesiones de gravedad en caso de accidente, aunque en Teruel tenemos ya muy pocos siniestros al año». La responsable municipal de Movilidad señaló, a su vez, que los estudios internos «ya muestran que la velocidad media en la ciudad es de menos de 30 km/h», por lo que considera que los turolenses «se adaptarán con facilidad a las nuevas normas».