El confinamiento ha puesto de manifiesto, entre otras muchas cosas, la calidad, conservación y salubridad de las viviendas, por lo que el Gobierno de Aragón ha decidido centrar esfuerzos en mejorar las condiciones de la vida en casa, en previsión de que en el futuro se repitan situaciones adversas, además de la necesidad que existe de impulsar nuevos objetivos de vivienda. La reactivación económica es un objetivo esencial, también en cuanto a recuperación, mejora o reparación de las casas, según ha explicado este jueves José Luis Soro, consejero de Vertebración del Territorio, Movilidad y Vivienda, que ha anunciado que Aragón destinará 10,7 millones de euros a la rehabilitación de viviendas en materia de accesibilidad, de los que 6,5 millones proceden del presupuesto de 2021 y el resto del remanente de 2020. La previsión es subvencionar actuaciones en un mínimo de 1.337 viviendas.

El Boletín Oficial de Aragón publicará este viernes la convocatoria de ayudas, dentro del plan 2018-2021, pero el plazo de presentación de solicitudes no comenzará hasta el 14 de junio para que los interesados puedan recabar toda la documentación, ha anunciado la directora general de Vivienda y Rehabilitación, Verónica Villagrasa, que ha especificado que para facilitar que las ayudas "lleguen a los casos más necesarios, se exige que la vivienda sea residencia habitual y que los residentes sean mayores de 65 años y con discapacidad superior al 33%".

La convocatoria contará con dos líneas, una destinada a actuar en viviendas individuales, ya sean unifamiliares o pisos, y otra a edificios con dos o más viviendas y un mínimo de 25 años de antigüedad, ha explicado Soro. Las ayudas de las viviendas individuales, ha especificado Villagrasa, subvencionarán las obras para hacer accesible la entrada a la vivienda unifamiliar y para facilitar la accesibilidad universal en el interior del hogar, tanto para personas con movilidad reducida como con otro tipo de necesidades específicas para otro tipo de discapacidad como sistemas de adaptación auditiva de la vivienda.

La línea destinada a edificios servirá para hacer más accesibles los espacios comunes con la instalación de ascensores, la bajada del ascensor a cota cero a la construcción de plataformas o rampas. Además, se podrán presentar obras iniciadas desde el 1 de enero de 2019, incluso aunque estén ya terminadas, así como actuaciones sin comenzar siempre que el plazo de ejecución no supere los 24 meses.

Las ayudas subvencionarán un máximo del 40 % del coste, que deberá superar los 2.000 euros, con un límite de 8.000 euros de ayuda por vivienda y, si participan locales, 80 euros por metro cuadrado. La concesión se hará conforme al orden de presentación, siempre que cuenten con toda la documentación y cumplan con los requisitos.

La última convocatoria, que se produjo en 2018, dedicó 14,2 millones a las ayudas, pero sumando las de eficiencia energética, que este año están a la espera de conocer la cuantía procedente de Europa.