El proceso de vacunación de los menores de 60 años que recibieron una primera dosis de AstraZeneca se va clarificando en Aragón. De hecho, Sanidad ha convocado a los estudiantes de Ciencias de la Salud –fueron los primeros vacunados el pasado mes de febrero– para el próximo lunes y martes, 31 de mayo y 1 de junio, con el fin de «ofrecerles la segunda dosis de Pfizer». Así lo ha asegurado este lunes la consejera de Sanidad del Gobierno de Aragón, Sira Repollés, poco antes de participar en un encuentro con entidades vecinales del Sector Zaragoza I, para explicarles el proyecto del futuro centro de salud del Barrio de Jesús.

A todos los convocados se les dará la posibilidad de inmunizarse con Pfizer pero quienes deseen que la segunda dosis sea, igual que la primera, con AstraZeneca, podrán a partir de esa misma fecha «autocitarse» y con la firma de un consentimiento se les administrará la vacuna de Oxford.

Preguntada por la previsión de vacunas, ha reconocido que «tenemos que esperar porque tendremos una previsión de ofrecerles a todos pero no todos se inmunizarán», así que las dosis «sobrantes de esta primera toma de contacto se distribuirán en otros grupos a lo largo de la semana», ha señalado. La inoculación de los estudiantes volverá a ser en el pabellón polideportivo del campus San Francisco.

casi 59.000 dosis esta semana

Aragón prevé distribuir esta semana un total de 58.734 de vacunas contra el covid, de las que 9.800 corresponden a Moderna, 1.690 a Janssen (reservada para temporeros y personas vulnerables) y 47.244 de Pfizer. De ellas, cerca de 15.264 están destinadas a segundos virales. La consejera de Sanidad ha explicado que esta «no es la semana que más dosis hemos recepcionado». De ahí que si se comienza a vacunar a las 43.000 personas que ya tienen una dosis de AstraZeneca y ahora deben elegir, «eso nos podría retrasar una semana o un poquito menos» el proceso, «pero creo que las podemos abordar con las previsiones que tenemos de llegada, si se cumplen», ha dicho, para a continuación apostillar: «Esperemos que las siguientes haya más».

 Respecto a la situación epidemiológica, ha afirmado que se «ha ralentizado mucho la curva de descenso, una situación lógica al tener el cese del estado de alarma, ahora hace dos semanas, y con la flexibilización de la hostelería, que hace ahora una semana». Una situación que calificó de «lógica» porque desde el Gobierno de Aragón se ha apostado «por un modelo que coordine el desarrollo económico con el control de contagios». Ese estar «casi en una meseta» hace que «de momento no podamos modificar las restricciones de la hostelería hasta que no entremos en una fase 2 como entró la provincia de Teruel».

También se ha mostrado preocupada por el «pico del Bajo Aragón- Caspe», un incidencia de 203,8 casos por 100.000 habitantes, cuando la media de Aragón es de 96,1, pero señaló que en «poblaciones pequeñas, pocos casos producen una incidencia muy importante», por eso dijo estar «alerta» por si hay que tomar alguna medida.