No termina de sonar del todo bien eso de España Vaciada, quizá porque no se le encuentra una determinación lingüística correcta, quizá simplemente porque no gusta. Eso sí, todo el mundo sabe lo que es, y quizá ese vaciada aceptado por la RAE le sirve para reforzar la idea de que esta despoblación no ha ocurrido por un fenómeno natural sino por el descontrol político. En el fondo, cuando se explica en Madrid suena más alto, no hay duda. Lo hizo en el Congreso Tomás Guitarte, el diputado de Teruel Existe, que aprovechó la mañana del martes, en la que pidió pagar menos impuestos que el resto del país, para machacar en medio minuto: «Insistimos en la terminología de España vaciada porque queremos poner en evidencia que fue el Estado, con sus políticas equivocadas, con su modelo de Estado equivocado en España, el que generó esas tremendas diferencias territoriales que hay. Y es al Estado al que le corresponde en primer lugar contribuir a solucionarlas».

Guitarte apeló ayer a una «fiscalidad diferenciada» en estos territorios porque es «un ejercicio de justicia», y si el Estado no les ha dado los mismos servicios, «es justo que no paguen los mismos impuestos». Los representantes de esta España abandonada han elaborado un documento para un nuevo modelo de desarrollo y Guitarte recordó que históricamente la fiscalidad diferenciada es una herramienta utilizada para repoblar y hoy es una obligación aplicarla a las empresas y los particulares que viven en estos territorios. También exigió un mecanismo de financiación estable para el mundo rural, «sea el que sea», que no dependa de quién esté en el Gobierno. Por aquí aprovechó para recordarle a Pedro Sánchez que los 10.000 millones de los fondos europeos, comprometidos el pasado sábado para el mundo rural, son solo un punto de partida.

Acompañado por representantes de distintos puntos del país, Guitarte apremió al Gobierno a «actuar ya» porque para algunos territorios esperar «un año o dos puede ser desastroso» y, además, consideró que habrá que «actuar de manera sostenida durante una década, dos o incluso tres», antes de subrayar que el principio de igualdad «que pregona la Constitución» debe cumplirse y la exigencia de que se aborden porque «esto no puede quedar como otro momento histórico donde se habló de despoblación pero no se solucionó nada».

El diputado de Teruel Existe, que se presentó únicamente como introductor del documento que ha sido elaborado desde la sociedad civil durante 8 meses por 80 plataformas y 160 organizaciones de 28 provincias, apeló a que se empiece a implantar «de verdad» el 5G en zonas donde no hay cobertura. «Pese a las declaraciones de buenas intenciones del Gobierno, estamos detectando inercias en los ministerios que van en contra de la solución del problema».

«Si de verdad se quiere generar empleo, la nueva industria que se tiene que crear debe ubicarse en las zonas despobladas» y si se opta por desconcentrar la administración, «debe hacerse ya, no pregonarse». En definitiva, pidió compensaciones y una nueva mirada hacia el mundo rural por lo mucho que aporta y por ser el soporte de las nuevas energías renovables.

En paralelo, el presidente del PP en Aragón, Luis María Beamonte, instó al Gobierno central y autonómico a habilitar «recursos, servicios y empleo» para fijar población en el medio rural y frenar el proceso de despoblación del territorio.

Beamonte, que visitó este martes Monreal del Campo, lamentó la falta de ejecución del Fondo de Inversiones de Teruel (Fite), «que ha derivado en la paralización de proyectos de interés para el desarrollo de la provincia». A su juicio, «la realidad es que el Fite de 2019 está sin terminar de ejecutar, el de 2020 sin convocar, y el de 2021 sin firmar, y lo que tienen que hacer (ambos gobiernos) es dejar de estar permanentemente haciendo anuncios que no son más que cantos que van al aire». Respecto a los fondos europeos, reclamó que se negocien con las comunidades con «diálogo y seriedad» a fin de que sean «un proyecto de país» y no una maniobra política.

Más de cien propuestas en 8 mesas

El Modelo de Desarrollo presentado para tratar de terminar con los territorios despoblados ha sido elaborado, siguiendo la «metodología de abajo a arriba», por más de 140 participantes que viven todos los días la realidad de los territorios abandonados, pertenecientes a 80 plataformas ciudadanas y entidades que durante ocho meses han debatido, trabajado y consensuado ideas, propuestas y acciones desde los diferentes territorios.

Este documento recoge propuestas, medidas y acciones, para revertir la despoblación de una forma efectiva, al ser creado por gente cercana a los territorios que sufren el desequilibrio territorial, conocedores de las carencias y los recursos que pueden ponerse en valor para generar desarrollo, empleo e igualdad.

Está dividido en 8 secciones (modelo, reformulación de políticas, cohesión social, infraestructuras y energía, motores de desarrollo, el sector primario, cultura e investigación, y economía, seguridad y vivienda), que son las mesas desde donde han trabajado los ciudadanos las diferentes temáticas y ámbitos. Afronta cómo avanzar en 38 temáticas y para ello aportan 101 propuestas «para el necesario proceso de reequilibrio territorial de España, un proceso vital necesario en el que estamos implicados todos los españoles».

Con la perspectiva del territorio se abordan cuestiones como un pacto de Estado contra la despoblación y por el reequilibrio territorial; el plan 100/30/30 (100 MB simétricos de acceso a internet, a 30 kilómetros de una autovía y a 30 minutos de desplazamiento a servicios básicos); medidas para asentar población desde el ámbito del bienestar; mantenimiento y creación de servicios en el medio rural; propuestas sobre infraestructuras de vertebración; fomento de la economía circular; digitalización prioritaria para acabar con la brecha digital; mantenimiento y puesta en valor del patrimonio natural y cultural; o un plan urgente de vivienda.