Hace poco más de un año, en los peores momentos de la pandemia, el Gobierno de Aragón decidió reunir a un grupo de expertos motivado por los retos que el covid planteaba a la sociedad. El objeto era reflexionar y analizar los caminos de desarrollo, los que debe recorrer la comunidad y los que vengan impuestos por las circunstancias sobrevenidas de cualquier índole. La idea era reunir en un documento cómo debe ser el Aragón del año 2030 y plantear escenarios y acciones necesarias, o posibles, para alcanzar dicho futuro. Se trataba, en definitiva, de plantear un marco de diagnóstico, de proponer acciones concretas en distintos plazos. Ayer ofrecieron sus primeras conclusiones al plantear 97 acciones al Gobierno para hacer de Aragón un territorio "ecosostenible, equitativo, resiliente, inclusivo y digital" en el comienzo de la próxima década.

El thinktank aboga por compatibilizar una economía innovadora y competitiva con una sociedad justa y equitativa para amortiguar el riesgo de una brecha social y generacional tras la pandemia. "A diferencia de la crisis anterior, la guía de gobierno ha sido no dejar a nadie atrás", ha dicho la  consejera de Ciencia, Universidad y Sociedad del Conocimiento, Maru Díaz, al presentar esta serie de acciones que pretenden convertir los retos que ha generado la pandemia en oportunidades y evolucionar el modelo social, económico y ambiental de la comunidad. "De esta saldremos todo juntos", ha enfatizado.

El valor del informe pasa por detectar los potencial es de la comunidad para liderar distintas acciones llamadas a ser estratégicas. Así, los expertos parten del análisis de las fortalezas y debilidades del territorio, en el que encuentran como puntos fuertes su sistema educativo, con la posibilidad de incorporar talento, un sistema de I+D+i iniciado, su capacidad de internacionalización, su localización geoestratégica y una menor conflictividad política interna que ayuda a forjar consensos.

En cambio, Aragón muestra, según los entendidos, falta de transversalidad y coordinación de sus acciones y políticas públicas, y ha de hacer frente al reto de la despoblación y al desafío de ofrecer servicios públicos esenciales de calidad en todo el territorio.

Como retos que se deben alcanzar el 2030 se han marcado cinco. Aragón será ecosostenible, dicen, si fomenta y compatibiliza el aprovechamiento de sus recursos naturales con el respeto al medio ambiente, al potencia la economía circular e integral y la reducción de contaminantes, desarrollando la infraestructura verde-azul y apostando por el uso sostenible de sus recursos y la recuperación de ecosistemas degradados.

Aragón será equitativo, aseguran, si cada uno de sus ciudadanos tiene cubiertas sus necesidades básicas, cuenta con los mismos derechos, posee las mismas oportunidades y cumple con sus deberes, independientemente de su condición socio-económica y lugar de residencia.

Aragón será resiliente, opinan, si alcanza una fortaleza institucional, se adapta a los cambios de forma eficaz y eficiente y es capaz de llevar a cabo todo ello desde su propia idiosincrasia e identidad (marca Aragón).

Aragón será inclusivo, creen, si apuesta por una conectividad real, el equilibrio territorial y una educación en competencias y valores que integre a todas las personas que habitan en Aragón y ayude a fortalecer los valores y propuestas democráticos de la sociedad aragonesa.

Y por último, indican que Aragón será digital si refuerza su potencial innovador (tecnológico, sanitario, digital, educacional, social, cultural, industrial), su capacidad emprendedora y de cooperación internacional.

Composición del comité

El thinktank está integrado por nueve especialistas en ámbitos socioeconómicos, ambientales y tecnológicos, que han trabajado a lo largo de un año de forma desinteresada, combinando reflexión individual, trabajo colaborativo y lluvia de ideas y puesta en común en reuniones presenciales y virtuales.

El catedrático Julio López Laborda, del Departamento de Estructura e Historia Económica y Economía Pública de la Universidad de Zaragoza, ha aportado su experiencia y conocimientos especialmente en el área de políticas públicas. Es experto en federalismo fiscal y en efectos de incentivo de la imposición, distribución y redistribución de la renta.

Para el ámbito de nuevas tecnologías, se ha contado con la participación de la doctora Cristina Aranda, consultora de IA y Digitalización y cofundadora de MujeresTech y Spain AI Aragón. Para Humanismo y Ética, otro de los pilares del comité, se ha fichado a José Luis López de Lizaga, profesor titular de Filosofía de la Universidad de Zaragoza y autor de varios libros y artículos sobre filosofía social, moral y política.

Lluís Gómez, director internacional en Barcelona Servicios Municipales, Smart City Expo y World Congress Director, colabora en la disciplina de Ciudades y comunidades sostenibles. En cuanto al área agroambiental, se ha elegido a Paco Comín, profesor de investigación del CSIC en el Instituto Pirenaico de Ecología, y miembro del Comité Directivo de la International Sustainable Development Research Society.

Por su parte, el catedrático del Departamento de Estructura e Historia Económica y Economía Pública de la Universidad de Zaragoza, Vicente Pinilla, se ha hecho cargo de la temática vinculada a Despoblación y Economía. Para la de Salud Pública, se ha involucrado a Isabel Aguilar, médico especialista en Medicina Preventiva y Salud Pública, experta en desigualdades en salud y utilización de servicios sanitarios.

Para el área de Innovación y Emprendeduría, se ha sumado al comité Clara Arpa, CEO de ARPA Equipos móviles de Campaña Sau y que es además presidenta del Centro de Innovación para el Desarrollo Sostenible y la única empresaria española miembro de la Junta del Pacto Global de la ONU.

Por último, la profesora titular de la Facultad de Educación de la Universidad de Zaragoza, Directora de Calidad e Innovación Docente, investigadora del IEDIS, y premio Educa Abanca 2019 a la mejor docente universitaria de España, Alejandra Cortes, es la principal responsable acerca de la temática de Educación.

Para alcanzar estas metas, plantean una serie de acciones que se tratarán de forma bilateral con los distintos Departamentos de la DGA con el objetivo de poder convertirlas en medidas de gobierno que permitan a Aragón enfrentarse con acierto a los escenarios futuros.

En cuanto al reto ecosostenible, las 17 acciones se centran en optimizar la utilización de los recursos naturales para que tengan un impacto positivo en el desarrollo local, profundizar en la economía circular y en la espiral, en poner en práctica una estrategia general del uso eficiente del agua en usos agrarios e industriales, en apoyar las iniciativas emprendedoras locales, y dotar de valor al producto rural, así como garantizar la calidad ambiental y la estabilidad social.

La equidad en el acceso a los servicios del Estado del Bienestar, así como el fomento de la economía social, un sistema fiscal sostenible y una financiación autonómica justa son las claves, en opinión de los especialistas, para avanzar hacia un Aragón equitativo. Las 20 acciones de este bloque inciden, por ejemplo, en favorecer el acceso a la vivienda, especialmente en el medio rural con planes de nuevas construcciones y una web pública del parque disponible para nuevos pobladores; y en reforzar la sanidad y reducir desigualdades con el Plan de Salud de Aragón 2030 y mejorando la Atención Primaria.

Entre otras medidas proponen también una Estrategia aragonesa de la Economía social, que promueva y consolide empleo inclusivo; una red de distribución de productos a domicilio para apoyar al pequeño comercio, y un plan y un instituto de emprendimiento para jóvenes.

En cuanto a financiación autonómica y fiscalidad, recomiendan seguir defendiendo que la población no es un indicador suficiente para asegurar la igualdad en la prestación de servicios y abogan por continuar ensayando políticas de rentas mínimas de manera coordinada con el Estado para estar preparados si se cumplen los pronósticos más pesimistas sobre el empleo. Asimismo, apuntan al camino que puede recorrerse sobre la presión fiscal en impuestos medioambientales y solicitan mínimos nacionales para las políticas tributarias y sociales.

Para hacer de Aragón un territorio resiliente, los expertos propugnan 21 medidas encaminadas al fortalecimiento institucional, a una mejor gobernanza y rendición de cuentas y a un liderazgo en I+D+i. Potenciar la marca Aragón, entendida como una región innovadora, socialmente cohesionada y comprometida con el medioambiente, es una de las primeras acciones de este bloque, en el que se insiste también en fomentar el gobierno abierto, impulsar el uso de la tecnología, como la Inteligencia Artificial o el Blockchain, y la formación en ella, y reforzar el sistema autonómico de I+D+i.

Por su parte, las 18 acciones encaminadas a convertir la comunidad en una región inclusiva persiguen reforzar y potenciar la educación y la formación, sobre todo en competencias, y reducir la brecha digital y el abandono escolar. Para ello apuestan, entre otras medidas, por mejorar la financiación de la universidad pública y potenciar los títulos propios del campus.

Asimismo, buscan favorecer la conectividad en todo el territorio, planteando incluso crear una infraestructura propia, fomentando servicios de recadería entre pueblos y poniendo en marcha ‘aradrones’ para dar servicio a todas las comarcas. En cuanto al equilibrio territorial, abogan por implementar con dotación financiera suficiente herramientas existentes, como la Directriz del Gobierno de Aragón, estimular el acceso a servicios bancarios en el medio rural, y poner en marcha ciertas iniciativas basadas en inteligencia artificial y blockchain.

El emprendimiento, la innovación sistémica, la competitividad y la cooperación internacional son las metas que se pretenden alcanzar en el camino hacia un Aragón digital. Las 15 acciones de este apartado persiguen, por un lado, potenciar el emprendimiento, a través de un Plan Regional en la materia y sobre Aceleración Empresarial, impulsando una plataforma aragonesa ARAZON, que funcione como un Marketplace, y reforzando Invest in Aragón y Aragón Exterior.

También se considera clave mejorar la formación y la divulgación sobre tecnología y su aplicación a los sectores estratégicos de Aragón para subsanar la falta de perfiles digitales o tecnológicos. Para ello, se proponen iniciativas como bootcamps en todo el territorio o centros pilotos sobre competencias digitales y espíritu emprendedor para fomentar una red de Jóvenes Makers.

Otro de los objetivos es acercar a la ciudadanía la Administración pública y hacerla facilitadora. En este sentido, se aspira a hacer posible montar una empresa en 24 horas y mejorar la atención por medio de una ventanilla única y digital para la creación o crecimiento de empresas o la gestión de ayudas.

A este primer informe, según han explicado los expertos, le sucederá un segundo, que incorpore el trabajo bilateral con los distintos departamentos del Gobierno.