Los afectados por covid-19 persistente reclaman la creación en Aragón de unidades de atención hospitalaria para este tipo de pacientes que pueden llegar a acumular hasta 36 síntomas de media por persona de los 201 descritos por la Sociedad española de Médicos Generales y de familia (SEMG).

En una nota de prensa, estos pacientes denuncian las "inequidades" en el trato al paciente en función del centro de salud que le corresponda, incluso el "ninguneo" por parte de los facultativos.

Este colectivo solicita a los grupos políticos aragoneses que se reúnan para tratar esta problemática con urgencia y consensúen una estrategia común.

Además de la creación de Unidades de atención al paciente covid-19 persistente, piden investigación específica, formación a los profesionales de la Salud y un recuento oficial de pacientes denominados Long covid.

"Lo que no entendemos es que no nos vean, no nos hagan seguimiento apenas y, si lo hacen, se quede en una llamada telefónica de control rápida para cumplir con el expediente", denuncian mientras reprochan la falta de acceso a visitas presenciales o a rehabilitación respiratoria.

Desigualdades

Citan que mientras en Andalucía se realiza un seguimiento "exhaustivo" con un internista que coordina todas las pruebas con las distintas especialidades y en Cataluña tienen una unidad pediátrica y para adultos puntera en el hospital público Germans Trias i Pujol (Can Ruti), con "pruebas adecuadas" para detectar las afectaciones persistentes de cada uno de los afectados, en Aragón se realiza la "tradicional analítica" y o se pide una radiografía de tórax "donde poco se puede detectar".

"Si no sabemos hoy en día cómo vamos a evolucionar los enfermos de covid Persistente porque tenemos un síndrome inflamatorio multisistémico que podría, a la larga, convertir nuestros síntomas actuales en secuelas o enfermedades crónicas, ¿por qué nadie se ocupa de nosotros?", lamentan los afectados, que se preguntan "¿quién decide si alguien tiene derecho a una atención asistencial justa y profesional?".

También preguntan por la formación continua en la atención asistencial, por el derecho al disfrute del más alto nivel posible de salud física y mental, a la prevención y el tratamiento de las enfermedades epidérmicas, endémicas, profesionales y de otra índole y la lucha contra ellas o a ser asistido por los servicios de Salud para su curación y rehabilitación y que aseguran "se está negando actualmente a la mayoría de las y los enfermos de covid persistente".

Para este colectivo, una sociedad que "sentencia a varias generaciones a padecer una enfermedad de por vida porque no quieren dedicarle medios es, por lo menos, cruel e irresponsable".

Y advierten que esta enfermedad "se traducirá" en incapacidades laborales, incremento del gasto sanitario en medicamentos "parches" en una reducción del consumo de ocio o educación o de niños y adolescentes que "no podrán seguir con una escolarización adecuada y no llegarán a realizar sus sueños, truncados por la enfermedad".