La calle Pere Maimó, situada en la localidad de S’Arenal de Llucmajor, ha sido el epicentro de la explosión de contagios de covid entre más de 300 estudiantes que viajaron a Mallorca para celebrar el fin de curso. Entre los afectados, procedentes de Madrid, País Vasco, Comunidad Valenciana, Murcia y Cantabria, hay 10 alumnos de Alcañiz, que estuvieron en la isla entre el 12 y el 18 de junio, según informaron este jueves fuentes del Departamento de Sanidad.

En total, desde Aragón viajaron un grupo de 15 jóvenes, de los que finalmente 10 resultaron contagiados. «No se han registrado más casos en grupos de estudiantes ni en contactos secundarios de los positivos», matizaron desde Sanidad. En estos casos, el protocolo a seguir es el mismo que en cualquier otro positivo de covid, con cuarentena y aislamiento.

Todos los estudiantes que viajaron a la isla tras terminar el curso se concentraban en esta zona y calles apartadas del Arenal «para que no tuvieran contacto con los propios residentes de las islas», según explicó Sergi Torrandell, jefe de la policía local de Llucmajor. «Durante los dos y tres primeros días juntamos a los que venían de viaje en una sola zona para que no se dispersasen. Venían en grupos burbuja, por lo tanto, en el caso de producirse contagios se darían dentro de ese mismo grupo y no afectarían a más personas», explicó. En este sentido, el policía indicó que «esta era la manera de tenerlos más controlados».

Las fiestas, en el punto de mira

Las celebraciones de fin de curso y los encuentros festivos entre los jóvenes son el motivo que ha propiciado la subida de la incidencia, en los últimos días, en la provincia de Teruel. Hace unos días, el director general de Salud Pública de la DGA, Francisco Javier, ya lo aventuró y en esta semana se ha confirmado. La tasa acumulada a siete días no ha dejado de crecer en la provincia de Teruel desde el 14 de junio hasta llegar a los 62 casos por 100.000 habitantes del pasado miércoles. Sin embargo, en las últimas 24 horas ha bajado por primera vez tras días de subida y es ahora de 58 casos. Teruel Centro y Ensanche han comunicado diversos casos, ya que ha sido en la capital donde se han focalizado estas fiestas de jóvenes. 

Sin embargo, la situación cambió cuando los residentes empezaron a acudir a las fiestas que se producían en esa misma calle. «Cuando nos dimos cuenta de que los propios mallorquines se desplazaban hasta allí fue el momento en el que decidimos cerrar la zona y dispersar a toda la gente. Esta era la mejor manera para que causarán el menor daño posible a los vecinos y los ciudadanos», añadió el agente.

Vecinos indignados

Al parecer, los jóvenes se distribuyeron en diferentes hoteles, pero hubo varios eventos como las party boats, donde los alumnos procedentes de toda la Península podrían haber coincidido, generando así los brotes que se han ido conociendo hasta ahora. Otro de los acontecimientos donde se podrían haber juntado es en el concierto multitudinario de reguetón en la Plaza de Toros del día 15, que la Policía finalmente tuvo que suspender por el incumplimiento de las medidas covid.

Por otro lado, la asociación de vecinos Amigos del Arenal se mostró «indignada» por los «constantes botellones» que están realizando los estudiantes en la zona. «Nos sentimos impotentes porque es una situación que denunciamos todos los años, pero no nos hacen caso», señalaron. «Los mandan allí para que no molesten, pero es una calle de apenas 10 metro y una aglomeración».