Los organismos públicos aragoneses se reunirán a finales de julio o principios de agosto para decidir qué hacer con las fiestas patronales en la comunidad a partir del 1 de septiembre. Así se ha acordado en el encuentro del Consejo local ampliado de este lunes, en el que también se ha insistido a los ayuntamientos en que no programen actividades en los días en los que tendrían que celebrarse sus festejos populares, que están suspendidos de forma oficial hasta el 31 de agosto.

Más allá de entonces, si la prohibición se levanta, podrían celebrarse las fiestas de grandes núcleos de población como Alcañiz (las fiestas son en septiembre); Barbastro (septiembre); Ejea de los Caballeros (entre agosto y septiembre); Fraga (octubre); Monzón (septiembre); y Zaragoza (octubre), donde el ayuntamiento ya está planeando cómo disfrutar de los Pilares si se dan las condiciones.

En la reunión del Consejo Local han estado representantes de los ayuntamientos de las tres capitales de provincia (Huesca, Zaragoza y Teruel), de las tres diputaciones provinciales (DPH, DPZ y DPT), el presidente de la Federación Aragonesa de Municipios, Comarcas y Provincias, Luis Zubieta, y miembros del Gobierno de Aragón, en este caso la consejera de Presidencia, Mayte Pérez, y la de Sanidad, Sira Repollés.

El encuentro ha servido para insistir, por parte de Sanidad, en la “extrema prudencia” que han de tener los municipios a la hora de organizar actividades, sean del carácter que sea. Por ello, como ya se había acordado en otras reuniones del Consejo, se ha pedido que aquellos eventos en los que no se pueda controlar el aforo es mejor que no se celebren. También se ha sugerido espaciar los actos que vayan a tener lugar a lo largo del verano y que se evite, como ya se había acordado, que coincidan con los días de las fiestas patronales, para evitar así los temidos efectos de las “no fiestas”.

Por su parte, desde el PP, la portavoz de Institucional, Mar Vaquero, ha calificado como de “improvisación absoluta” y “chapucera” la gestión del covid que “el Gobierno de Aragón viene desarrollando sobre la celebración de diferentes actividades lúdicas en los municipios” y cuya consecuencia, dicen, “es la incertidumbre e inseguridad” que provocan en los regidores de las entidades locales.

Según los populares se tendrían que haber previsto más escenarios más allá de simplemente prohibir las fiestas patronales y, en concreto, “trasladar recomendaciones y condiciones específicas para la celebración de fiestas populares, eventos, espectáculos públicos, festejos taurinos, apertura de piscinas y otros equipamientos municipales durante el verano”. Desde la DGA aseguran que todas estas cuestiones ya están suficientemente reglamentadas e insisten en la idea de no organizar ninguna actividad en la que no pueda controlarse el aforo.