El número de nuevos contagios en Aragón no deja de crecer. Salud Pública ha notificado 1.055 nuevos positivos, 293 más que un día antes. Las comparaciones son odiosas, pero en este caso más, ya que hace una semana, cuando los casos ya se habían disparado se notificaron 115 menos que ayer; y justo hace cuatro semanas, 117 nuevos casos, por lo que los contagios se han multiplicado por 9 en solo un mes. Hace justo un año, la cifra fue de 333. Para encontrar un número similar hay que remontarse al 5 de noviembre del pasado año, cuando hubo 1.050 nuevos casos, siendo el récord histórico el 24 de octubre, con 1.345 contagios. La vacunación y la juventud de los enfermos es lo que hace que la presión hospitalaria no se haya disparado.

Sanidad esperaba que esta semana comenzaran a bajar los casos e incluso se planteaban la flexibilización de los horarios de la hostelería (23.00 en hostelería y 00.30 en ocio nocturno), sin embargo, las previsiones no se han cumplido y ahora podría ser todo lo contrario.

Con los casos al alza en toda España y varias comunidades autónomas aplicando el toque de queda, en Aragón, de momento, no, aunque nada es descartable. Cataluña solicitará este miércoles prorrogar sus restricciones y ampliar a más municipios el toque de queda; y Navarra lo volverá a solicitar después de que los jueces lo tumbaran. Canarias espera respuesta a su recurso y el lendakari Íñigo Urkullu ha pedido «un marco de seguridad jurídica» para decretar el toque de queda sin ir a los tribunales. Galicia estrena restricciones.

Muchos especialistas lo reclaman. La presidenta del Colegio Oficial de Médicos de Zaragoza, Concepción Ferrer afirmaba recientemente a este diario que «el toque de queda sería ahora una medida eficaz». El epidemiólogo Nacho de Blas, abogaba por el sentido común, lo que implica el uso obligatorio de la mascarilla al aire libre si no se puede mantener la distancia social. El País Vasco, Andalucía, Castilla-León y Baleares han pedido al Gobierno que vuelva a ser obligatoria pero el Ejecutivo no parece estar por la labor.

En las olas anteriores, Aragón respondió al aumento de casos con nuevas restricciones. Ahora, Ciudadanos pide más medidas preventivas y menos limitaciones para afrontar la sexta ola ampliando «la atención sanitaria para no seguir arruinando por el camino a miles de negocios, señaló la portavoz de Sanidad, Susana Gaspar, al mismo tiempo que pidió la comparecencia de la consejera de Sanidad, Sira Repollés, en las Cortes.

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En la cuarta ola, tras las Navidades, se decretó el toque de queda, con el cierre de la actividad no esencial a las 18.00 horas; y el confinamiento de Zaragoza. Antes, en noviembre, se había creado un nuevo nivel 3 de alerta agravado, por lo que se permitió prolongar el toque de queda y cerrar lo servicios no esenciales a las 20.00.

Y en abril, en la ola más reciente, se alargaron las limitaciones impuestas por la Semana Santa. Aragón estaba confinada perimetralmente y tenía implantado el toque de queda entre las 23.00 y las 6.00 horas. Además, se cerraron ciudades (entre ellas, Tarazona, Fraga y Cuarte), que pasaron a nivel 3 agravado. Ahora la situación no es la misma, pero la evolución de los casos en los próximos días será lo que haga si se implantan nuevas medidas. H