Aragón se encamina a una ola de calor a partir del próximo jueves y que puede traer máximas absolutas, de récord histórico, de 45 grados en la capital aragonesa. "Va a ser un periodo prolongado de calor intenso y persistente", advierte Rafael Requena, responsable de la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) en la comunidad.
La ola de calor será la más larga y fuerte de este verano irregular y es posible que llegue hasta el martes de la semana que viene, un total de seis días, sin el alivio del cierzo en el valle del Ebro.
"Se puede batir perfectamente el récord de la máxima de agosto", subraya Requena, que aconseja a los aragoneses estar pendientes de todos los avisos relativos a la meteorología y que sigan los consejos en materia sanitaria que aparecerán asimismo en la página web de Aemet.
Batiendo récords
La máxima de agosto en Zaragoza está en 42,8 grados, mientras que la máxima absoluta del año se sitúa en 44,5 grados, temperatura que se alcanzó el 7 de julio de 2015. Pero existe el riesgo bastante probable de que los próximos días se batan ambas plusmarcas.
Las mínimas más altas hasta la fecha también se pueden tambalear. Su récord está en 24,7 grados, pero no sería extraño que, en plena de calor, se rebase ese valor, propio de las noches tropicales, cuando no se baja de los 20 grados. Este fenómeno se ha consolidado desde que empezó el siglo XXI, con un promedio de 20 noches al año en Aragón, muy por encima de la frecuencia que se registraba en las décadas finales del XX.
"Solo si sopla el cierzo a partir del lunes o el martes que viene se aliviará la ola de calor", señala el responsable de la Aemet en Aragón.
Un refugio en Galicia
En resumen, a partir del día 12 se espera ya que se llegue a los 40 grados, un valor que se puede ver superado, sin ser posible en estos momentos precisar en qué medida. Se tratará de un fenómeno que abarcará toda España, si bien cada autonomía hay un distinto umbral a partir del cual se considera que se produce una ola de calor, más bajo en el Cantábrico y más alto en las provincias del interior, entre ellas Zaragoza.
Solo una esquina de Galicia puede quedar al margen, pero no así Cantabria, Asturias y el País Vasco, que hasta ahora han tenido un verano más bien fresco.
El anterior episodio de calor fuerte se dio los días 22 y 23 de julio pasados en Aragón, con máximas de 40 grados. Pero en aquel caso se trató de un episodio breve al que ha seguido un tiempo irregular, con bruscas bajadas de las temperaturas, máximas y mínima.
