Un vecino de Zaragoza ha sido detenido tras aprovechar que un repartidor de comida a domicilio perteneciente a la empresa Glovo se había desprendido de la bicicleta para hacer una entrega y robarle su medio de trabajo. 

Según manifestó el denunciante, sobre las 21.00 horas se dirigió a un domicilio del barrio de las Delicias para entregar un pedido, dejando su bicicleta en el interior del portal del edificio y subiendo al piso correspondiente. 

Minutos después, cuando bajó de nuevo al portal, se percató de que la bicicleta había desaparecido, indicando a los agentes que sospechaba que el autor de los hechos podría ser un vecino del propio bloque porque al llamar al timbre del portero automático le llamó la atención un varón que se asomó a la ventana.

Los agentes de la Policía Nacional, tras realizar las averiguaciones pertinentes, se dirigieron al domicilio del vecino indicado por el denunciante. Este presentaba un gran estado de nerviosismo y les reconoció el hurto de la bicicleta que tenía guardada en su vivienda, entregándola voluntariamente en ese momento.

El hombre fue detenido, trasladado a dependencias policiales y puesto a disposición del Juzgado de Instrucción en funciones de guardia. Tras su declaración fue puesto en libertad con la obligación de presentarse ante la autoridad Judicial cuando para ello fuera requerido.