Aragón va a flexibilizar a partir de la noche del jueves (a las 00.00 horas) las medidas restrictivas contra el covid y el ocio nocturno es, sin duda, uno de los mayores beneficiarios de los cambios que vienen. El sector, que el pasado sábado acudió a la Justicia para exigir ampliar sus horarios, podrá cerrar a las 4.00 horas y la admisión de clientes será hasta las 3.30 horas. Además, en su interior tendrá un 50% de aforo, con mesas de 10 personas, mientras que en el exterior será de un 100%, con mesas de hasta 15 personas.
Eso sí, nada de bailar ni de juntarse para ello, porque el uso de las pistas de baile sigue restringido y el consumo en el ocio nocturno deberá hacerse en mesa para evitar cualquier aglomeración.
Es la buena evolución epidemiológica que atraviesa la comunidad la que motiva esta flexibilización de medidas, aunque el nivel de alerta sigue el 2 modulado. La diferencia con el anterior está en la ampliación de horarios y capacidad de clientes. De hecho, en hostelería (cafés, bares y restaurantes) se elimina cualquier limitación de apertura y estos establecimientos recuperan el cierre que venga determinado en su licencia municipal. Es decir, lo mismo que ya venían haciendo antes de la pandemia.
Eso sí, lo que todavía sigue prohibido es el consumo en barra. En el exterior, la hostelería mantiene terrazas al 100% de aforo, pero las agrupaciones se amplían de 10 a 15 personas. En el interior, por su parte, el aforo es del 50% y las reuniones por mesa de 10 clientes frente a los seis de antes.
En lo que respecta a las grandes celebraciones (bodas, bautizos y comuniones), el aforo pasa del actual límite de 90 personas al máximo de capacidad «si los asistentes presentan certificado de vacunación, de recuperación del covid o una prueba negativa en las 72 horas previas si es PCR o de 48 horas antes si es antígenos», según explicó ayer la consejera de Sanidad de la DGA, Sira Repollés.
Vuelven las palomitas al cine
En eventos multitudinarios se permitirá un aforo de 250 personas en el interior y de 500 en el exterior, mientras que la novedad está en los cines: se podrá volver a consumir alimentos siempre que haya una distancia de 1,5 metros. Es decir, vuelven las palomitas delante de la gran pantalla.
En cuanto a las reuniones sociales, estas deberán ser de un máximo de 30 personas. Por su parte, actividades culturales, congresos, conferencias, gimnasios, piscinas, comercios y lugares de culto mantienen su 75% de aforo, un porcentaje muy próximo ya al nivel 1 de alerta y que no tiene sentido variarlo ahora.
La sexta ola en Aragón parece que toca a su fin, aunque Repollés se mostró cauta a la hora de dar por finalizado el proceso. «No sabemos cuándo podremos anunciar una situación de normalidad y ojalá hubiera un límite que nos permitiera definirlo. Nos movemos siempre en la incertidumbre y nos podemos llevar sorpresas, pero los indicadores dicen que seguimos bajando», señaló.
Un 70% menos de fallecidos
La sexta onda en Aragón se puede comparar, por volumen de contagios, con la cuarta (la que tuvo lugar tras la Navidad). La gran diferencia entre ambas está en los fallecidos, que ahora han sido un 70% menos. «En la cuarta ola tuvimos 677 muertes y ahora han sido 200. Esta es una consecuencia de la vacunación», apuntó Repollés. «La hospitalización también ha sido un 45% menor y hemos tenido un 69% menos de pacientes en uci», añadió.
La evolución de la vacunación también ha repercutido favorablemente en los brotes de las residencias, que han bajado. «La posibilidad de reinfectarse es mínima y la vacunación es un ejercicio de solidaridad. Debe hacerse porque la diferencia está en evitar una enfermedad grave», reflexionó el director general de Salud Pública de la DGA, Francisco Javier Falo. «Sabemos que llegar al 100% de la población va a ser imposible», añadió.
Pasaporte covid para el ocio nocturno
Por otro lado, Repollés ha apuntado que están "trabajando" con el sector del ocio nocturno en la elaboración de una orden por la cual se pida un pasaporte covid para acceder a los locales de ocio nocturno. "En próximas fechas podremos anunciarlo y esperamos tener una autorización judicial para aplicar esta medida", ha señalado. En ningún caso, por el momento, se ampliará a otros sectores como hostelería.
El jueves, además de la orden de modulación de medidas, también se publicará otra en la que se prohibirán la celebración de fiestas patronales hasta el 31 de octubre. Las fiesta del Pilar llegan en menos de un mes y la consejera ha vuelvo a realizar una llamada a la "prudencia" y a la responsabilidad ante la celebración, entre cosas, de botellones. "Están prohibidos con pandemia y sin ella", ha dicho. Habrá controles de estas reuniones para evitar aglomeraciones, pero en cualquier caso Repollés ha indicado que este octubre "es diferente" al del año pasado, cuando se produjo un repunte tras el Pilar. "No había vacunación y no es la misma situación, aunque hay que apelar a la prudencia porque sigue habiendo un banco de susceptibles", ha dicho.
Por su parte, el director general de Salud Pública, Francisco Javier Falo, se ha mostrado tajante ante la posibilidad de que los peñistas puedan celebrar festejos: "No hay Fiestas del Pilar. Los peñistas tienen actividades muy vinculadas a las fiestas y si no las hay, no tienen sentido", ha dicho. Como normativa, las reuniones sociales deben ser de un máximo de 30 personas.
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