El ocio nocturno considera la ampliación del horario hasta las 4.00 de la mañana (podrán admitir clientes hasta media hora antes) un “gran paso adelante” porque “vamos a poder empezar a facturar” pero, al mismo tiempo, dicen que es una medida insuficiente porque “solo nos dan media hora” con respecto a la hostelería tradicional. Además, la califican de “un agravio comparativo” porque no están permitidas ni las barras ni el baile y un aforo del 50%. Así lo ha afirmado este mediodía Alberto Campuzano, portavoz del sector y presidente de la Asociación Provincial de Empresarios de Salas de Fiesta, Baile y Discotecas de Zaragoza.

Por su parte, Miguel Ángel Salinas, vicepresidente del colectivo, y gerente del grupo Canterbury, ha dicho que la relajación de medidas suponen “un alivio” pero “para nada lo que pretendíamos” porque en la demanda presentada al Tribunal Superior de Justicia de Aragón pedíamos abrir hasta las 3.30, que es “lo que nos han dado”, pero también “dos horas de diferencia con la hostelería tradicional”, que podrá abrir hasta las 2.30 horas y tendrán media hora más para su desalojo, lo que, repite, supone un “agravio comparativo”. De hecho, Salinas se alegra por sus compañeros, y él también se beneficia de la medida porque tiene cuatro restaurantes, “pero me perjudica en dos y no es justo”.

En este sentido, Campuzano define la situación como “ridícula” y todavía se muestra “incrédulo” por esa permisividad de media hora. Por eso, asegura que los criterios para tomar las medidas son “arbitrarias y políticas pero no técnicos”, al mismo tiempo que critican que “nadie da la cara” ya que en estos más de 500días cerrados, la consejería "aún no nos ha recibido", ha criticado Salinas.

Por eso, desde el ocio nocturno van a esperar a que se pronuncie el Tribunal Superior de Justicia de Aragón ante quien recurrieron para poder cerrar a las 3.30; y si “no recuperamos el 100% de nuestros derechos” (considera Campuzano que no lo hacen al tener solo media hora de diferencia con la hostelería tradicional) se “lo dirán a un juez”, porque, explica, de 570 días “solo hemos abierto 40 noches” ( algunos más en horario de cafetería). Y añade: “nos han tenido todas las olas cerrados” y “quiero saber por qué este sacrificio”. De ahí que pidan criterios técnicos y según lo que dicte el TSJA, su abogado, Marco Antonio Navarro, está incluso dispuesto a presentar “una querella por lo criminal”. Campuzano ha criticado también las palabras del presidente de Aragón, Javier Lambán, quien un día antes había asegurado que se ponía por delante la salud a la economía, a lo que Campuzano sentencia: “para tener salud hay que comer” y a gran parte del ocio nocturno “nos han arruinado”.

Salinas, por su parte, añade que será en el juzgado donde se dirá “por qué la gente se contagia más de madrugada que en un restaurante comiendo y cantando sin mascarillas”. Además, al vicepresidente le ha chocado la rapidez de la comparecencia de la consejería de Sanidad, ya que siempre se levantaban restricciones “a partir del jueves” y se quejaban porque no podían programar conciertos o contratar camareros y ahora, lo que cree es que “se han querido adelantar al TSJA”, que tenía 48 horas para contestar a sus alegaciones.