La Asociación Aragonesa Pro Salud Mental (Asapme) celebra el Día Mundial de la Salud Mental 2021 bajo el lema 'Salud mental, un derecho necesario. Mañana puedes ser tú', con el fin de reclamar que la salud mental sea un derecho de todas las personas, independientemente de su situación personal, económica, social, educativa, etc.

Desde las asociaciones de familiares y personas afectadas, defienden este derecho como un atributo esencial y necesario. Y es que, si hay algo que iguala a la condición humana, es el deseo de disfrutar de un buen estado de salud mental. Sin embargo, la despersonalización de la sociedad y la escasez de oportunidades han propiciado una realidad en la que predomina la desigualdad.

Aunque a priori, el principal obstáculo que aparece es el económico, existen otra serie de factores que generan desigualdades, ya no solo en el acceso a servicios de atención a la salud mental, sino en la calidad de la salud mental de la población. Factores como la competitividad, la soledad y el aislamiento social o la incomprensión.

Además, la OMS constata diversos factores que influyen en la salud mental de las personas a lo largo de su vida. El organismo internacional reconoce que hay desigualdades sistemáticas entre grupos sociales atribuidas a factores de género, edad, etnia, ingresos, educación o área geográfica de residencia, y que constituyen los desencadenantes de las diferencias del estado de la salud mental de la población.

Tomando esta conclusión como punto de partida, desde las asociaciones como Asapme reivindican políticas activas que reduzcan la brecha de género, de edad, la discriminación de colectivos vulnerables y que se ofrezca igualdad de oportunidades para luchar contra la discapacidad psicosocial.