Tan solo tres meses ha durado la ordenanza reguladora con la que el Ayuntamiento de Beceite pretendía hacer pagar en 2022 a los visitantes del Parrizal en concepto de uso y disfrute de las pasarelas que recorren este enclave natural en el Matarraña.

Hasta ahora, el precio que se pagaba era de diez euros en concepto de párking para acceder tanto al enclave del Parrizal como a las Pesqueras. Para los vecinos empadronados en el municipio esta tasa era gratis y para vecinos con segunda residencia y turismo rural se ofrecia una tasa reducida de seis euros por vehículo.

Las alegaciones que asociaciones de la localidad y vecinos a título individual han presentado han impulsado la decisión del ayuntamiento de dar marcha atrás a la ordenanza reguladora. Desde el ayuntamiento, el alcalde, Juan Enrique Celma, se mostró preocupado por el alcance que han tenido las protestas. «Al final es un tema que ha llegado hasta el justicia y aunque no estamos de acuerdo hemos considerado que lo mejor para todos es buscar otra solución», comentó el primer edil.

El consistorio trabaja ya en la redacción de una nueva ordenanza reguladora que sustituirá, tanto a la existente actualmente, como a la que se ha retirado. El consistorio espera poder presentarla al pleno y que sea aprobada.

Por otro lado, la asociación vecinal de Beceite se mostró aliviada de que se haya decidido retirar la ordenanza que ellos consideraban que suponía una discriminación entre los empadronados que viven todo el año en Beceite y aquellos vecinos que tan solo pasan los periodos vacacionales en sus segundas residencias situadas en la localidad.

Aun así el colectivo se mantiene reacios porque no creen que la nueva ordenanza termine con la discriminación. «Lo que no nos parece bien es que si todos, vivamos o no, pagamos los mismo impuestos no todos tengamos las mismas ventajas», indicó Montse Boix, portavoz de la plataforma vecinal.

Desde el ayuntamiento, el alcalde alega que son muchos los pueblos y ciudades en los que las personas que están empadronadas reciben ventajas. «No comparto su opinión, yo me debo a mis vecinos que son los que pasan aquí todo el años», manifestó el alcalde «no son vecinos porque al final el único tiempo que esta aquí es el mes de agosto y deben respetar lo que decida el ayuntamiento que está elegido por aquellos que viven aquí todo el año», añadió. 

Durante el verano tanto los residentes ocasionales como los vecinos han protagonizado hasta tres protestas exigiendo que se suprima el coste de estas tasa para todos aquellos que tengan una casa y sus raíces en la localidad turolense. El Parrizal es una zona de gran valor natural y durante la temporada estival cada día recibe más de 150 coches en los dos turnos que se puede acceder, por la mañana y por la tarde