La capital del Somontano celebró ayer Barbastro, Cuna y Corona, un programa de actividades que recuerda el pasado medieval de la ciudad, vinculado a la reina Petronila de Aragón, de origen barbastrense. Las visitas teatralizadas y talleres agotaron las entradas previas, que debían reservarse con antelación para cumplir con los protocolos sanitarios.

Durante todo el sábado se desarrollaron distintas actividades por iniciativa de la Asociación de Empresarios de Somontano de Barbastro (AESB), la empresa local Diferente y Destino SL y el Área de Desarrollo del Ayuntamiento de Barbastro. El mercado medieval, abierto al público de 10 a 21 horas, incluyó una exposición de espadas y objetos medievales a cargo de Guillermo Blázquez, venta de productos artesanales y agroalimentarios, demostración de trabajos a la cera perdida, y música en vivo por las calles así como actividades infantiles.

La céntrica plaza del Mercado, el paseo del Coso, las calles Romero y San Ramón y la zona de los Jardinetes revivieron por un día el pasado medieval de la ciudad en una cita que el pasado año no pudo celebrarse todavía por las afecciones de la pandemia