El zaragozano barrio de la Almozara tiene 30.000 habitantes. Durante los meses de la pandemia muchos de esos vecinos tuvieron carencias en cuanto a cuestiones digitales. Falta de medios, de conexión a internet o de conocimientos digitales se convirtieron en un gran problema para los vecinos. La solución ha llegado al barrio en forma de cursos de formación, la Fundación Adunare con el impulso de la Junta Municipal del Distrito de la Almozara, liderada por la concejala de distrito María Ángeles Ortiz, ofrece a los vecinos ayuda para adaptarse a la nueva realidad digitan en la que viven.

“Es necesario ofrecer oportunidades de aprendizaje a las personas que por falta de medios, conocimientos o circunstancias no pueden acceder a la nueva realidad digital. Estas personas han visto limitado el acceso a muchos servicios pero incluso a la interacción con otras personas en estos momentos que tanto se utilizan las redes sociales”, comenta María Jesús Ruiz, directora de Fundación Adunare.

Esta es la segunda edición de estos cursos que ofrecen mayor cobertura a colectivos que son vulnerables. Son tres los colectivos que se benefician, mayores que viven mayoritariamente solos, población adulta del barrio, priorizando a las mujeres y a aquellas responsables de familias monoparentales y jóvenes con especial dificultad de conocimiento de la lengua castellana. Cada uno de los grupos recibe una formación adaptada tanto a su conocimiento previo como a sus necesidades, mientras los más mayores aprenden a pedir cita para el médico o a utilizar los servicios de mensajería para interactuar con sus familiares, jóvenes y adultos dirigen su conocimiento a aprender a gestionar procesos burocráticos y temas escolares.

Esta mañana la concejala de distrito ha querido visitar las instalaciones que la fundación tiene en el barrio para conocer de primera mano cómo se está desarrollando esta segunda edición de los cursos. “Una de las cosas que hemos aprendido de la pandemia es que la brecha digital es un de los motivos fundamentales de la desigualdad entre las personas. Por este motivo, el año pasado empezamos con estos talleres de capacitación con Fundación Adunare y este año hemos vuelto a repetir”, explica María Ángeles Ortiz.

“Se trata un combate contra la brecha digital en el barrio y vamos a poner todos los recursos que dispongamos para tratar de reducirla. Es importante ser conocedores de la realidad y de las necesidades concretas de las personas por eso se han definido unos talleres modulares, cortos y ajustados a las necesidades de las personas del barrio en el que se les enseña recursos digitales para la vida diaria” añade la concejala.

En total son 64 las personas que se están pudiendo beneficiar de estos cursos e incluso en el caso del grupo de los adultos existe una lista de espera. La presidenta de la fundación ha incidido en que son cursos adaptados y diseñados en torno a las necesidades de estos colectivos más vulnerables y que se trabaja en que los propios alumnos se adapten a los medios que tienen en su propia casa, en la mayoría de los casos, sus propios smartphones. Se trata, en definitiva, de cursos de capacitación para la vida diaria de los vecinos de La Almozara.

Los propios alumnos se muestran encantados con esta iniciativa y muy agradecidos con la Junta de Distrito de La Almozara ya que en sus propias palabras "en otros barrios no se ofrecen estas oportunidades".